Redacción El País
Impactada por el “efecto Pascua” (la semana de Turismo este año fue en marzo y el año pasado había sido en abril), la economía uruguaya se contrajo en marzo y exhibió un magro crecimiento en el primer trimestre del año.
Si bien los datos finales del primer trimestre se divulgarán a mediados de junio cuando se de a conocer la evolución del Producto Interno Bruto (PIB), ayer el Banco Central (BCU) dio a conocer el Indicador Mensual de Actividad Económica (IMAE).
Este es un indicador sintético que resume la actividad de las distintas ramas de la economía en un determinado mes y que adelanta lo que puede suceder con el PIB.
En marzo, el IMAE cayó 1,1% en la medición interanual (frente a marzo de 2023) y 1,2% en la medición desestacionalizada (frente a febrero de 2024).
En ambos casos, se comparó contra un mes con una semana más de actividad ya que marzo de 2023 y febrero de 2024 no tuvieron la Semana de Turismo.
El gerente de Análisis Económico de la consultora CPA Ferrere, Nicolás Cichevski, dijo ayer en su cuenta de X (antes Twitter) que “el IMAE anticiparía que durante el primer trimestre el PIB creció 0,4% interanual -frente al primer trimestre de 2023- (incidido negativamente por el ‘efecto Pascua’) y 0,7% frente al cuarto trimestre de 2024”.
“En tendencia-ciclo, la tasa de crecimiento promedio anualizada de los últimos seis meses ronda el 1,25%”, agregó Cichevski.
El dato de crecimiento de 0,4% interanual en el primer trimestre que da el IMAE, confirma que la economía uruguaya comenzó el año más lenta de lo esperado.
La estimación de consenso de los analistas que respondieron la Encuesta de Expectativas Económicas del Banco Central en marzo, fue de un PIB creciendo 2,1% en el primer trimestre en la comparación interanual.