FINANZAS DE BOLSILLO
Un mundo donde ya se manejan más de US$ 100.000 millones a nivel internacional que tuvo un gran impulso en los últimos años
Cada vez son más las personas que deciden adentrarse en el mundo de las finanzas descentralizadas. Sin embargo, para quien no conoce del tema puede ser complicado de entender por las diferencias que hay con el sistema tradicional. Además, se manejan términos que hasta hace unos años no existían.
Entonces, ¿qué son? Las finanzas descentralizadas (DeFi por su nombre en inglés) es un ecosistema que permite a los usuarios usar diferentes productos y servicios financieros. Allí se puede realizar una operativa de cambio de moneda, tomar un préstamo, realizar una colocación, contratar seguros, entre otros. Está separado del sistema financiero tradicional, no existe una contraparte central y funciona en la tecnología de blockchain. Así lo explicó a El País Martín Larzabal, director de Cryptotrust Fiduciaria.
Los servicios y productos financieros se crean a través de las aplicaciones descentralizadas (llamadas DApps) que están basadas en blockchain. La más utilizada es Ethereum, aunque hay otras como Solana y Cardano, agregó.
En el mundo de las finanzas descentralizadas se utilizan los contratos inteligentes, que “están escritos en código y permiten a dos contrapartes fijar las condiciones de una transacción sin la necesidad de confiar en un tercero para que se ejecute”, comentó.
Asimismo, no “hay nombres” y no se necesita que alguien te autorice la apertura de una cuenta. Sí para interactuar se precisa una billetera virtual y, por lo general, se requiere colocar el dinero en el contrato inteligente, añadió.
¿Cómo se puede saber el tamaño de las finanzas descentralizadas? Larzabal contó que en la página web DeFi Pulse está el monto de dinero alojado en los contratos inteligentes. Señaló que a principio de 2019 la cifra no llegaba ni a los US$ 300 millones, a comienzos de 2020 ya estaba en algo más de US$ 1.000 millones y ahora se encuentra en US$ 107.000 millones.
Opciones de finanzas descentralizadas
Las monedas estables (stablecoins en ingles) son criptomonedas que están vinculadas a activos estables y, por lo tanto, sufren de menos volatilidad que, por ejemplo, el bitcoin. Larzabal contó que cumplen un rol muy importante en las finanzas descentralizadas, y que las más transaccionadas son las respaldas en el dólar con una paridad uno a uno.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) advirtió en octubre que el término ‘moneda estable’ puede “generar confusión dadas las diferencias entre los tipos de garantías y la calidad del crédito, así como entre los mecanismos de estabilización de precios”.
Asimismo, señaló en el “Informe sobre la estabilidad financiera mundial” que la “regulación de las monedas estables varía sustancialmente según la jurisdicción, lo cual suscita inquietud en torno a las lagunas regulatorias, la falta de coherencia en el tratamiento regulatorio y el arbitraje regulatorio”.
Tal como se mencionó anteriormente, hay un amplio espectro de cosas que se pueden hacer en el mundo de las finanzas descentralizadas. Una de las opciones es recurrir a una plataforma de lending, donde se prestan diferentes activos digitales, cada uno con tasa de interés específica, explicó Larzabal. Al mismo tiempo aclaró que no se intercambian dólares físicos, pero sí stablescoins pegadas a ellos.
Se puede tomar un préstamo o poner el dinero a disposición para que otro lo agarre bajo determinadas condiciones. El director de Cryptotrust Fiduciaria señaló que si una persona quiere “poner a trabajar su dinero”, lo puede convertir en una stablecoin o en una criptomoneda y a cambio va a recibir una tasa de interés pasiva.
Asimismo, explicó que quien toma el dinero paga una tasa de interés activa, y se le exige una sobrecolaterización del crédito. “Si estoy tomando 100 de préstamo, me van a exigir que ponga 120 de garantía” en el contrato inteligente”, añadió.
Por otro lado están las plataformas de exchange descentralizadas, donde se pueden intercambiar activos digitales. Larzabal expresó que “si se quiere poner a trabajar el dinero” se puede “contribuir con puntas de compra y ventas a cambio de un porcentaje de los fees que se operan en los exchanges y, a su vez, te pueden dar tokens del protocolo”.
Pros y contras de las finanzas descentralizadas
Una de las ventajas es que con el contrato inteligente, aunque no haya una contraparte central que vele por que se cumpla, se ejecuta y nadie lo puede cambiar, explicó Larzabal. Además, entiende que esa inmutabilidad le da una fortaleza muy grande y evita manipulaciones. Por ejemplo, una persona no puede ir y modificar la tasa de interés de un préstamo. En esa línea, destacó que es transparente, y que si alguien realiza un cambio, todos lo podrán ver. Otro punto a favor es que se puede interactuar con él las 24 horas del día.
También hay desventajas. Los contratos son inmutables y, al mismo tiempo, escritos por seres humanos que pueden cometer errores. En otras oportunidades donde se encontró alguna vulnerabilidad, la comunidad se puso de acuerdo en cambiar el código para resolver el problema, comentó.
Asimismo, el que sea auditable también tiene su contracara. El director de Cryptotrust Fiduciaria señaló que cualquier usuario lo puede estudiar, incluidos los hackers que pueden buscar vulnerabilidades para, por ejemplo, intentar robar los fondos que tiene el contrato inteligente.
Por último, comentó que cuando hay mucha operativa en las aplicaciones a veces se puede generar un cuello de botella que hace que la transaccionalidad sea más lenta. No obstante, contó que se están dando cambios para que en el futuro no suceda.
Estudiar y no despreciar el mundo de las finanzas descentralizadas
Para aquellos que recién comienzan, Larzabal aconsejó “estudiar y no despreciar este mundo”, ya que pueden llegar a “aparecer cosas muy interesantes e importantes”. Además, cree que, “en la medida que las personas empiecen a conocer que existen estas posibilidades, el mercado va a crecer”. También advirtió que “es un mundo al que no hay que tenerle miedo” pero sí respeto, y que hay que “ser cauto con los pasos que se dan”. Una de las cosas con las que hay que tener cuidado es con las claves, ya que la custodia de los activos digitales está en las manos de las personas. Recomendó estudiar sobre el tema para evitar ser hackeado o perder las monedas digitales por un descuido.
“El ecosistema de las criptofinanzas ofrece un nuevo y fascinante universo de oportunidades para transferir valor con rapidez y a bajo costo, ampliando el acceso de la gente a servicios financieros novedosos y dándoselo por primera vez a partes del mundo hasta ahora desprovistas de servicios bancarios. Pero al mismo tiempo plantea retos en un amplio abanico de aspectos”, dijo el FMI en el “Informe sobre la estabilidad financiera mundial”.
Asimismo, indicó que el “rápido crecimiento” del ecosistema de las criptofinanzas “ha venido acompañado de la aparición de nuevas entidades, algunas de las cuales tienen deficientes marcos operativos, de gestión del ciberriesgo y de gobernanza”.
En esa línea señaló que “se perfilan grandes riesgos en términos de protección para los inversionistas en el ámbito de los criptoactivos y las finanzas descentralizadas. Debido al anonimato de los criptoactivos y a la poca normativa internacional al respecto, existen lagunas de datos significativas para los reguladores y riesgos para la integridad financiera”.
Entiende que las autoridades deberían “priorizar la aplicación de normas internacionales para los criptoactivos y mejorar la capacidad de vigilancia del ecosistema de las criptofinanzas eliminando las lagunas de datos”.
Riesgos de dolarización por los criptoactivos
“En las economías de mercados emergentes y en desarrollo, la llegada de criptoactivos y monedas estables podría acelerar los riesgos de dolarización y restar eficacia a las restricciones cambiarias y las medidas de gestión de controles de capital vigentes”, señaló el Fondo Monetario Internacional (FMI) en el “Informe sobre la estabilidad financiera mundial” publicado en octubre. Asimismo, indicó que “la intensificación de la compra y la venta de criptoactivos en los mercados emergentes podría generar flujos de capital desestabilizadores. Una migración de las actividades de ‘minería’ hacia las economías de mercados emergentes y en desarrollo también puede tener graves implicaciones para los flujos de capital, así como para el consumo energético”.