ASIGNACIÓN ESPECIAL
La asignación no es endeudamiento con el FMI, sino que es un monto de dinero que le corresponde a cada país por ser miembro del organismo.
La Junta de Gobernadores del Fondo Monetario Internacional (FMI) aprobó una asignación general de derechos especiales de giro (DEG, el activo de reserva del organismo) equivalente a US$ 650.000 millones, con el objetivo de apuntalar la liquidez mundial.
“Esta es una decisión histórica: la mayor asignación de DEG en la historia del FMI y una inyección de ánimo para la economía mundial en medio de una crisis sin precedentes. La asignación de DEG beneficiará a todos los países miembros, abordará la necesidad de reservas a escala mundial y a largo plazo, generará confianza y promoverá la resiliencia y estabilidad de la economía mundial”, señaló la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, en un comunicado.
“Los nuevos DEG serán acreditados a los países miembros del FMI en proporción con sus actuales cuotas en la institución”, explicó el organismo.
Uruguay es uno de los 190 países miembros del FMI (se unió 11 de marzo de 1946) y desde que el primer gobierno del Frente Amplio canceló el acuerdo stand-by el 27 de diciembre de 2006, no tiene deuda con el organismo.
La asignación no es endeudamiento con el FMI, sino que es un monto de dinero que le corresponde a cada país por ser miembro del organismo. A Uruguay le corresponderán US$ 585 millones, que los recibirá (como el resto de los países) el próximo 23 de agosto. Ese dinero va directamente a las reservas que gestiona el Banco Central.
Esta asignación de DEG es “gratuita”. Por un lado hay “un aumento en la asignación de DEG (pasivos) de los participantes del Departamento de DEG (actualmente todos los miembros del Fondo) y un aumento equivalente en sus tenencias de DEG (activos). El Departamento de DEG paga intereses sobre las tenencias de DEG a cada país y aplica cargos sobre las asignaciones de DEG de cada miembro a la misma tasa. Por lo tanto, una asignación de DEG es ‘gratuita’ para todos los miembros porque los cargos y los intereses se reducen a cero si los países no utilizan sus asignaciones de DEG”, explicó el FMI.