La construcción de muelles con cimientos a mayor profundidad y el dragado del puerto de Montevideo y su Canal de Acceso permiten operar buques de mayor tamaño y con calados más importantes. La profundidad actual de -13,00 metros pronto será incrementada a unos muy respetables-14,00 metros. Esto consolidará la posición de Montevideo como el puerto de aguas profundas de la región, fortalecerá su rol histórico como punto de transferencia del comercio exterior de nuestro país, exportador de servicios para la región, y centro de una activa industria de los servicios portuarios.

A estos avances se suma ahora la reciente licitación convocada por Argentina para mejorar la Vía Navegable Troncal que une Confluencia de los ríos Paraná y Paraguay con la zona de aguas profundas naturales del Río de la Plata (el principio del Canal Punta Indio). El perfil del puerto de Montevideo ha evolucionado. Ahora cuenta con una terminal especializada en el manejo de gráneles, y otra dedicada a las exportaciones de celulosa.

Sin embargo, continúa atrayendo principalmente carga general (en contenedores o en bultos): en el período enero-octubre del año pasado, manejó ocho millones de toneladas de carga en contenedores, 2,6 millones de toneladas de carga general convencional, y 2,7 millones de toneladas de graneles.

En cambio, el puerto de Nueva Palmira, funciona predominantemente con diferentes tipos de graneles.

Otra diferencia clave entre los dos puertos es que, mientras Montevideo se encuentra sobre el Río de la Plata medio y cuenta con un Canal de Acceso que lo comunica directamente con las aguas de mayor profundidad de aquel y el océano Atlántico, Nueva Palmira está situado sobre la confluencia de los ríos Paraná y Uruguay.

Ello tiene, por un lado, la ventaja de su situación como el umbral de la Hidrovía y, por el otro, la desventaja de depender de un sistema de canales de navegación para comunicarse con aquellas aguas más profundas.

Ese sistema incluye los canales en las aguas de uso común del Río de la Plata, construidos y administrados por nuestro vecino platense, y los canales de Martín García operados conjuntamente a través de la Comisión Administradora del Río de la Plata (CARP).

Desde el punto de vista de la operación naviera, la profundidad de ese sistema de navegación es determinada por su punto menos profundo. En el primer caso las profundidades mínimas son de -10,5 metros en el Canal Punta Indio, y- 10,36 metros (en fondos blandos) en el segundo.

La República Argentina recientemente llamó a una licitación pública internacional para “la modernización, ampliación, operación y mantenimiento del sistema de señalización y tareas de dragado, redragado y mantenimiento de la Vía Navegable Troncal”, entre el kilómetro 1.238 del Río Paraná hasta el kilómetro 239,1 del canal Punta Indio. Los trabajos proyectados para una segunda etapa incluyen estudiar la viabilidad de realizar un importante dragado de profundización en el sector del Río de la Plata “vía canal Emilio Mitre”.

Son todos avances alentadores.

¿Cuál será el impacto de las propuestas mejoras en la Vía Navegable Troncal sobre el movimiento de buques y cargas navegación por Martín García y Nueva Palmira? Tanto en el corto plazo, como en un futuro más distante.