Todo está pronto en Maldonado para dar comienzo a una temporada que se vislumbra como más que buena. Con ansiedad se espera a los argentinos que luego de varios años llegarían en grandes contingentes. De hecho, el movimiento desde el 20 de diciembre es bastante mayor que años anteriores.

¿Qué encontrarán los veraneantes este año? Si son argentinos y hace tiempo que no desembarcan por estas latitudes, hallarán, por ejemplo, una Punta del Este (entendiendo como tal la costa que va de Portezuelo a José Ignacio) que no ha parado de crecer y en la que los desarrollos inmobiliarios han seguido asomándose en los cien kilómetros de su costa.

Otro tanto sucederá con los que opten por Piriápolis y la sucesión de playas que lo siguen. Y con sus sierras aledañas, cada vez más pobladas y con emprendimientos que han descubierto su increíble paisaje.

Si el visitante viene de Montevideo, seguramente el impacto será por la limpieza y el cuidado de todos y cada uno de los balnearios que cuenta este privilegiado Departamento.

¿Cuál es el secreto? No lo hay, o tal vez sea que la Intendencia de Maldonado, que hace diez años consecutivos la encabeza el ingeniero Enrique Antía, sabe cuáles son las obligaciones de un gobierno municipal y las cumple. En Maldonado, como en otros departamentos de la República, no se considera un lujo burgués y tampoco una frivolidad tener una ciudad limpia, cuidada y querida por las autoridades y los propios vecinos.

Algunas cifras sirven para ilustrar lo antedicho. En el servicio de limpieza de todo el Departamento de Maldonado trabajan 220 personas, entre personal municipal y pequeñas y medianas empresas. Otros 180 individuos están abocados al cuidado de los espacios verdes de todo Maldonado. En suma, son 400 los trabajadores responsables de que los casi 213 mil habitantes permanentes del departamento vivan en un jardín casi infinito. Esta población se triplica en la temporada de verano, lo que hace que en enero y febrero supere los 600 mil habitantes.

La recolección de residuos, en camiones adecuados, se realiza todos los días de la semana. En Punta del Este, en alta temporada, es diaria y en las zonas rurales y centros urbanos alejados se hace cuatro o cinco veces a la semana.

Alcanza con recorrer no solo Punta del Este, sino también cualquier centro urbano del Departamento para comprobar el buen estado en que se encuentran los contenedores; lucen nuevos, pintados de verde inglés, y sin graffitis. En las plazas y avenidas, abundan las papeleras. Es evidente que los vecinos colaboran con el servicio que presta la Intendencia. Un dato más, el presupuesto de limpieza es el 14% del presupuesto total de la Intendencia.

A los argentinos que están llegando por estas horas no les llamará la atención ver este vergel que es la costa de Maldonado. Mucho menos si son porteños, porque Buenos Aires es una gran metrópolis limpia.

En mayo, los uruguayos vamos a las urnas nuevamente. Los montevideanos nos tendremos que pronunciar sobre si otra heladera gobernará la ciudad, completando cuatro décadas consecutivas de decadencia, mugre e impuestos abusivos o si elegimos un cambio. ¡Feliz 2025!