Seregni lo consiguió

Compartir esta noticia

El Gral. Líber Seregni lo consiguió. Han pasado 40 años desde que, en marzo de 1984, Seregni me recibió, al día siguiente, o el segundo día después de su liberación: fue su primera entrevista. La primera que daba tras la cárcel, creo; sin duda, la primera a un medio independiente. ¿Y por qué a mí? Quizás porque nos conocíamos desde antes -de la “99” de Michelini-, y porque yo representaba a un medio independiente -Búsqueda- al que él respetaba. Tenía sus razones: “Era a través de Búsqueda que yo me informaba, era el único medio que me dejaban entrar, los convencí de que era un semanario económico y que no había riesgos”, me dijo y remarcó: “Fue por Búsqueda que me enteré de que se me iba a liberar”. Y efectivamente el semanario anticipó en exclusiva la noticia de su liberación.

Parte de lo conversado fue “off the récord”, yo preguntaba pero el general también quería preguntar. Para no “pifiarla”, acordamos que Oscar Bottinelli, hombre de su mayor confianza y presente en la reunión, diera una lectura previa a la entrevista. Lo que se publicara, poco o mucho, era “gran noticia”.

Seregni reiteró que su objetivo y su intención era trabajar para que el Frente se integrara al sistema como un partido más. Dejar de ser una de esas alternativas de ocasión, con algo de consuelo y desahogo; una forma de lavarse las manos o de rebeldía ante los dos grandes partidos tradicionales. No lo dijo, pero interpreté que su idea era que el FA se transformara en una partido tradicional más, que dejara de ser algo marginal y un “cuco”.

Si no lo interpreté mal, pienso que el general lo consiguió. Antes los uruguayos decían: sí, puede ser, pero yo siempre voté a los blancos o en casa siempre votamos a los colorados, y no había caso. Hoy es más común oír: sí, puede ser, son todos iguales, pero yo voto al Frente, siempre he votado al FA. Son los que igual votan una heladera, de la misma forma que ocurría antes con colorados y blancos, cuando eran solo ellos.

Consulté, para no errarle, con Ignacio Zuasnábar de Equipos y con el nombrado Bottinelli: hoy el mayor partido tradicional es el FA. Entre un 30 y un 35% de los uruguayos lo señalan cuando se les pregunta sobre su “pertenencia política”.

¿A esos frentistas va a salir a buscar Álvaro Delgado y Aire Fresco, con el ariete del wilsonismo de Javier García y con D-Centro? Supongo que no. Esos no se mueven. ¿Qué les van a prometer?: la nacionalización de la banca, la reforma agraria, integrarse el Foro de San Pablo, el partido único.

No entiendo ese “rastrillar” entre quienes han sido votantes del FA, pero que no “pertenecen” y que no lo hicieron en la última. Unos 400 mil. Para ello, Jorge Gandini tiene más ventajas comparativas, pienso.

Esos 400 mil, que el FA anuncia que saldrá a recuperar, votaron en contra del Frente, hartos del FA y sus dirigentes, del despilfarro, del sindicalismo al servicio del partido y de la soberbia. Querían un cambio: no al FA, sus gordos y sus capitanes. Fue lo que se dio en octubre del 2019. De ello se benefició Luis Lacalle Pou, quien a gatas pudo mantenerlos en Noviembre. Lo del liderazgo viene después, con la presidencia y su gestión. Muchos de esos 400 mil apoyaron el cambio. Siguen eso y esperan más. ¿Ofrecerles ahora algunas posturas frentistas moderadas? No es lo que quieren, creo.

Para eso voto otra vez al Frente, dirá más de uno.

¿Encontraste un error?

Reportar

Temas relacionados

premium

Te puede interesar