Traducido al inglés “A Whiter Shade of Pale” fue el éxito de la música popular británica más escuchado en la historia de la radiofonía. Clásico de Procol Harum (famosa banda inglesa) que hoy presagia y nos alerta del pálido color que van adquiriendo algunas democracias. Osaré incluir la nuestra que destiñe del preeminente color blanco que ha imperado en la Coalición gobernante hacia un eventual triunfo de otra Coalición (llamada Frente Amplio o Frente Angosto) y que para asegurarse el triunfo apela a integrar su Sena-do con una comunicadora llamada Blanca.
Con su Blanca Palidez también el FA acude cual manotón de ahogado a un recurso válido. Pero no por valido dejemos de recalcar: muy trillado. Una Outsider. ¡Vaya novedad! Una señora que durante 34 años leyó noticias en uno de los principales noticieros de televisión. Que siempre se dejó entrever sus simpatías hacia el frenteamplismo con gestualidad ostensible.
En todo caso y nobleza obliga, fue siempre una culta y correcta informativista con cualidades que no se pueden desconocer a la hora de los reconocimientos. Como dijera el Gaucho Fajardo en mi pueblo: “doña Blanca hablaba hasta sin faltas de ortografía”. No obstante ello; cuesta entender la cobertura de medios de comunicación que tuvo su lanzamiento.
Hubo una suerte de “Cadena Nacional de Televisión” tan espontánea como un cuadro de nado sincronizado en las últimas Olimpiadas. Los canales dispusieron de un tiempo inusitado de trasmisión jerarquizando un evento que no guarda puntos de comparación con otros análogos de igual o superior jerarquía. Por citar uno: hace pocas semanas se produjo el regreso de un gran referente político de este siglo: Pedro Bordaberry. Sin embargo la cobertura del lanzamiento tuvo una “pálida” cobertura en los canales privados de televisión. Unos pocos minutos para comentar la noticia. En cambio el martes pasado los uruguayos tuvimos la sensación que llegaba a la próxima legislatura alguien que iba a cambiar los destinos del Uruguay.
¿Qué condiciones perciben los canales de televisión en Blanca Rodríguez que nos pueda augurar qué la política nacional tendrá un giro de 180 grados.
Tal vez traicionado por mi subjetividad entiendo que esta irrupción en la política es fruto de la más Blanca Palidez de nuestra democracia. Alcanza con comprobar la ausencia de debates de calidad, la carencia de propuestas o planes de gobierno que no solo te cuenten ¿qué quieren hacer? Sino ¿cómo? Nadie arriesga mucho o solo se tiran temas muy puntuales. El candidato a presidente por el FA no solo no quiere debatir con nadie sino que además no desarrolla idea alguna ni profundiza en nada. Cada vez que es forzado a soltar alguna opinión, suelta un irresponsable y reiterativo: “Algo hay que hacer”.
Obviamente que no hay notero que le repregunte sobre alguna solución en concreto. Agréguenle a esto el papelón del sr. Orsi contestando burlonamente sobre Venezuela y todo eso termina de explicar el PORQUÉ la irrupción electoral de la pálida tez de Blanca importa hoy el mayor salvavidas al que puede recurrir la Coalición fapitcenetista si aún aspira a ganar las elecciones en noviembre. Cuanto más se hable de Blanca y menos de la fórmula presidencial, más cerca estarán del objetivo. La democracia uruguaya expuesta hoy a su más Blanca Palidez.