Las elecciones nacionales son una competencia por obtener el voto de los ciudadanos. Las fuerzas en pugna tienen ventajas y debilidades conforme sus características. Así nos lo enseño Michael Porter alguna vez.

¿Dónde somos fuertes o débiles?

La Coalición Republicana tiene ventajas competitivas. Por ej.: Su conducción en la política económica.

Por más que el ec. Oddone haya desbarrancado en estos días buscando empatizar con la “pesada” del FA e intentando minimizar la figura de la ec. Arbeleche; su crítica pasará al olvido porque la gente en Uruguay no es tonta y valora los logros y el temple de una brillante ministra.

Es ventaja competitiva de este gobierno y potenciará el voto hacia la Coalición. No es la única. Su debilidad hoy es el desgaste con episodios que destiñen su gestión. Algunos referidos a corrupción en gobiernos municipales otros vinculados al entorno de figuras de gobierno.

La real ventaja competitiva de la izquierda en Uruguay sigue siendo el relato. Los datos los defiende el Oficialismo. El Relato es hoy la mejor herramienta de la oposición. Los “honestos” están al lado de Yamandú y la corrupción en la vereda opuesta.

La desventaja competitiva de la Coalición es que en octubre debe defender su gestión y ya quedaron lejos Sendic, Calloia o Gas Sayago. Y debe enfrentar sus datos al relato de un FA que hoy se parece mucho a Baak. Esa criatura mitológica hindú que supo ser un animal maléfico alguna vez y ahora se convirtió en una figura humana que se acerca a sus semejantes para luego redimirse y convertirse un día en fierecilla y atacar a sus congéneres. El FA suena a Baak para mí.

Que me perdone el lector opositor, pero no compro el “buenismo” de nadie en política. Aun así, tienen legítimo derecho a señalar los errores del gobierno de Coalición.

Otra ventaja competitiva de la oposición es aprovechar la polea de trasmisión de valores de izquierda que en Uruguay esta muy aceitada. Desde los medios masivos a la cultura y pasando por un ex fiscal de Corte. También allí el manejo astuto del relato constituye un arma muy poderosa. Se aprovecha cada circunstancia. Por citar ej:

Se despidió de un informativo una periodista con años de actuación. Entiendo y comparto que se destaque esa trayectoria. Pero ya pasa a ser parte del relato frentista el exceso en ríos de tinta y horas de cobertura mediática de alguien que todos ya sospechamos tendrá un pronto reciclaje en la política partidaria. Solo la izquierda uruguaya y sus tentáculos de poder pueden organizar una cobertura de honores a una informativista afín.

Por tanto ¿qué le queda a la Coalición como herramienta?

Destruir relatos no es sencillo. Pero además de los datos de inflación, salario, empleo, covid-19, riesgo país, hay buenos argumentos para defender un nuevo tiempo “multicolor”.

Por citar alguno: la diversidad de sus partidos. Da amplitud y fortalezas en programas y cuadros políticos. Su lejanía de las tiranías continentales.

Los candidatos y las fórmulas casi sin excepción están mejor preparados para los debates. Y aunque estos no sean aceptados el ciudadano promedio se da cuenta que el dueto frentista no resiste un debate en serio.

Final de bandera verde nos espera. ¡No rompan los boletos!