@|Hace unos días, cuando la ocupación y posterior desalojo de los centros de estudio, se hicieron presentes legisladores del F.A., dicen ellos, como garantía de que fuera todo normal.
¿El F.A. como garantía?
Lo que están buscando estos señores y señoras es que haya algún desmán, la policía actúe y tengan una víctima para tener un mártir para poder usarlo bien políticamente.
A ver si entienden, la Constitución de la República no avala las ocupaciones ni públicas ni privadas, lo que sí permite es el derecho a huelga, que es sagrado; y punto.
Además, el gobierno del Dr. Vázquez, en su momento, hizo un decreto rengo, porque autorizó las ocupaciones en empresas privadas pero prohibió las mismas en instituciones públicas. Y en la LUC, que hace poco la ciudadanía aprobó, se establece que ocupar lugares de trabajo es ilegal.
¿Está claro?
Todos deben entender que tenemos un capitán que es quien comanda la nave, y lo hace muy bien, por algo ha sido reconocido como la mejor gestión de un Presidente de la región. Personalmente, opino que está despegado con mucha ventaja de los demás; pero es una opinión personal.
Lo que sí quiero alertar es que no nos pase lo que decía Martín Fierro: “...los devoran los de afuera”. ¿A qué viene esto? A que algunos integrantes del Acuerdo Republicano, especialmente alguno del sector Ciudadanos y de Cabildo Abierto, le hacen el “caldo gordo” a los que ponen palos.
Nos están tirando con todo, y va aumentando la agresión a medida que se acerca el 2024, y sobre esto quiero advertir que si no se mantiene la unidad de actuación gubernamental, estamos en el horno.
Van dos veces que casi nos pasa. La primera en noviembre de 2019. Los dirigentes de todos los partidos del acuerdo se durmieron y para noviembre casi que no trabajaron. Pasado octubre, obtuvieron sus bancas de diputados o senadores y el gasto lo hizo el Dr. Lacalle Pou y muy pocos más. Luego el referéndum por la LUC y pasó lo mismo; casi nadie trabajó para proteger la ley, y casi, casi...
Y por último, otra alerta: el Pte. Vázquez, una semana antes de irse, firmó un decreto donde establecía beneficios para los familiares de los tupamaros que cobran jubilaciones de privilegio; y los ciudadanos pensamos que fue un decreto inmoral.