Mario Coppetti | Montevideo
@|En recientes declaraciones el Intendente de Durazno hacía una suerte de crítica a los resultados electorales, haciendo hincapié en la conformación de la fórmula presidencial del Partido Nacional y por ende de la Coalición Republicana.
También hizo referencia a su amistad con el ex-presidente Mujica y su esposa.
Obviamente uno puede ser amigo de quién quiera, sin importar su credo o ideología, pero hacer alarde de tales amistades realmente no lo entiendo.
Que no sean adecuados revanchismos y resentimientos podemos estar de acuerdo, pero hay cosas que no se pueden olvidar ni borrar. Pese a que una gran parte de la población no quiera entenderlo, los tupamaros son y serán siempre los enemigos de la democracia y de las instituciones. Por tanto no se entiende al jerarca municipal en sus expresiones contrarias totalmente a los principios nacionalistas.
Que hay que construir entre todos bien, pero manteniendo cada uno su impronta.
Las revoluciones de antaño no se comparan en ningún aspecto a la que quiso llevar adelante la guerrilla tupamara, absolutamente en nada, ni en valor, ni en principios.
Que quede claro.