@|Se trata de una perrita de porte mediano, color beige con alguna mancha blanca, que está en una casa adyacente a la Iglesia San Juan Bautista, en Pocitos.
El caso es que esa perrita, desde prolongado tiempo atrás, ladra incesantemente y ahora aúlla, como buscando ayuda.
Me comuniqué con varios refugios a los que suelo ayudar y no tuve respuesta alguna.
Entiendo que no es humano dejar que siga en esta situación de sufrimiento y por eso esta carta.