@|Cuestión de prioridades:
Y si hablamos de los social, es innegable que un Centro de Convenciones y/o Espectáculos no es prioridad como política pública.

No existe dinero para medicamentos de alto costo, el Hospital de Clínicas podría ser puesto a nuevo y suministrar insumos y tecnología medica para hospitales del Interior (tomógrafos, quirófanos, compra de ambulancias, material ortopédico, etc.); pero existen unos 100 millones de dólares (no solo los 40 iniciales del proyecto) para un “AntelArena” con los que podrían financiarse centros de adicciones, construcción de gimnasios o plazas deportivas, refacción de escuelas, policlínicas, un plan de becas laborales, ayudas a fundaciones para atención a personas con discapacidad y sus programas, inversiones en caminería rural, fondos de incentivo a Pymes, aumento del subsidio al transporte (bajando costos), planes de becas para investigación y desarrollo, etc. 

No importa si ya existen políticas en estas áreas (que solo un negador serial podría decir están cubiertas), todas ellas se verían significativamente potenciadas con una inyección millonaria equivalente al costo del proyecto de este recinto, absolutamente innecesario. 

Cuánto insumo de materiales policiales para combatir el crimen (en una escala sin precedentes); cuánto equipamiento para bomberos principalmente en el Interior.  

Un avión hidrante contra incendios forestales, policlínicos móviles, plantas procesadoras de residuos, materiales para playas accesibles, un plan de reciclaje, 2 millones de dólares a cada comuna/intendencia para centros comunitarios, etc. 

Son ideas que me vienen de inversión de/desde un gobierno de “izquierda”, y no centros para actividades “culturales” en la capital. 

Un gobierno que invierte (no hablemos gasta) en este “tipo” de cosas (propias de privados), y no en cuestiones prioritarias (vivienda, salud, educación y seguridad), no parece “popular”. 

Sumemos la “inversión” (gasto) innecesaria del nuevo software del BROU (con problemas y no funcional) en momentos que parecen ser más “antojos” que prioridades o políticas públicas.  

Repito, no debato si ya existen presupuestos para alguna de las cosas citadas, sino cuánto más es el logro en estas actividades y medios con un plus equivalente al costo del Antel Arena.