@|A raíz del fallo del Juez Recarey que obligó a suspender la vacunación a menores de 13 años, el Frente Amplio, a través de su presidente, respaldó al gobierno.

Fernando Pereira lo consideró un error, cuando en Uruguay la vacunación no es obligatoria. Pero no hay que olvidar que durante la pandemia la presión que se ejerció sobre el gobierno. Se le pedía cuarentena obligatoria; hubieron caceroleos, movilizaciones, asambleas, actos. Los malos augurios de posible colapso en los CTI (que no ocurrieron) y los pedidos constantes al Ministerio de Economía. O cuando al fin llegó la vacuna, las quejas por la demora del gobierno, el apuro por las compras, el atraso con respecto a otros países, el poner en duda la eficacia de las mismas, los contratos, etc.

Pero cambia, todo cambia...

Parece que tan mal no se estaban haciendo las cosas...