@|¿Cómo es posible que ciudadanos que integran el cuerpo legislativo uruguayo, se manifiesten de la manera escuchada en estos días? Me estoy refiriendo a ciertos legisladores del conglomerado frenteamplista.
¿Realmente el Sr. Andrade y el Sr. Núñez piensan que en Cuba está todo bien? ¿Que son inventos de la prensa? ¿Que lo manifestado por los cubanos en Uruguay no se ajusta a la verdad? ¿Por qué se va la gente de la isla?
La respuesta es simple: emigran porque no aguantan más la tiranía y la dictadura Castrista que la lleva más de 60 años.
¿Por qué les cuesta decir dictadura cuando se habla de Cuba, Nicaragua, Venezuela? ¿Siempre es EE.UU. el culpable de todo ?
No señores, no le mientan más a la gente, sean honestos de pensamientos. Ustedes son simples servidores públicos que fueron electos por 5 años.
La democracia se construye y mantiene con verdades y no con falacias. Su dogma es siempre el mismo, la culpa la tiene el otro. Emplean sistemáticamente la palabra genocidio, pero defienden tiranías y dictaduras.
Pol Pot, Stalin, Kim Jong Un y sus ancestros, esos sí fueron y son genocidas; como pasó en Camboya con los Yemeres rojos, en la ex Unión Soviética y actualmente en Pyongyang. También existieron genocidios en España, previo a la Guerra Civil Española, perpetrados por comunistas españoles. Hechos que costaron vidas; siendo violadas y masacradas dos ciudadanas uruguayas, una de ellas monja, que terminó con la ruptura de las relaciones diplomáticas entre Uruguay y España. El genocidio ocurrido en la Segunda Guerra Mundial perpetrado por Hitler. La Real Academia Española dice al respecto: Genocidio - exterminio o eliminación sistemática de un grupo social por motivos raciales, religiosos o políticos.
Señores de la oposición de gobierno, su partido perdió en las urnas democráticamente, no estén rabiosos y majaderos de odio, construyan y aporten; la revancha la tienen en el 2024. Lealmente y sin mentirle más a la gente, las universidades ideológicas comunistas del mundo ya fueron, no se queden en el pasado.
El día que aprendan a decir simplemente gracias por el país que tenemos y reconozcan sus propios errores, allí van a dar un paso importante. Con la democracia no se juega.
Por último, cada vez se ven menos caranchos y buitres, se empiezan a avistar calandrias, golondrinas y cardenales, a pesar de los agoreros.
El pueblo cubano y el uruguayo sólo pretenden algo sagrado que no se compra en el súper: libertad, trabajo, salud, seguridad y esperanza.