Acad. Ing. Rosario Pou | Montevideo
@|Hago referencia a la carta que figura en la edición del pasado jueves 1/8, firmada por el Sr. Goy Viera Silva.
Creo que es necesario destacar la pertinencia de lo que afirma, acerca de actitudes totalmente alejadas de la realidad y más aún de los derechos de los propietarios, entre las que se incluye la convocatoria para la “Zona Protegida de Centurión y Sierra de Ríos”.
Esta problemática se repite en diferentes zonas del país, algunas de las cuales han vivido una dramática transformación en los últimos 40 años, de la mano del desarrollo forestal… lo de dramática, es porque pasaron de ser consideradas las zonas de grave problemática socio-económica, a estar en medio de un movimiento que además de trabajo y valor para las tierras, logró la descentralización de la actividad económica en Uruguay. En los años 70, la OPP trabajaba arduamente con la OEA en la Zona Tacuarembó- Rivera, con polos de pobreza extrema en algunos poblados: hoy día es una de las más dinamizadas por las plantaciones forestales-logística e industria.
Es necesario tener en cuenta que aunque la preocupación respecto del ordenamiento territorial y el medio ambiente ha sido considerada (en 1990 se crea el Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente, y en 2020 el Ministerio de Ambiente) en lo que tiene relación con la actividad forestal no se ha puesto al día, ni ha coordinado con los otros ministerios que tienen atribuciones en la materia (Ganadería, Agricultura y Pesca, Industria, Energía y Minería).
Se han multiplicado los trámites y lo que aún es peor, los criterios de evaluación, muchas veces influidos por las teorías que hacen de los forestales los “malos” de la película, y muchas veces por el desconocimiento y falta de idoneidad para la toma de decisiones.
Con una base productiva que corresponde a un 8% de la superficie total del país, la madera y la celulosa representan el primer rubro de exportación, alcanzando todos los mercados, aun los que han puesto trabas ambientales… toda la cadena productiva está certificada según normas internacionales.
Es fenómeno normal en Uruguay, la compraventa de tierras, la libertad del propietario para hacer negocios (tal vez no guste a quienes hacen las regulaciones) y porque no, el cambio de matriz productiva. El caso más cercano en el tiempo es el de la agricultura, que impactó a partir de nuevas tecnologías e inversores/socios argentinos.
Apoyo en forma absoluta al lector pidiendo a quienes hoy ejercen el gobierno que revisen estas normas y a quienes las promueven: sólo lograrán enlentecer el proceso de crecimiento del país y además favorecer a quienes, por su posición o tamaño empresarial, pueden lograr excepciones.