@|El pasado 27 de marzo, la mayoría de la población se pronunció a favor de la LUC.
Hoy comprobamos la sutileza de la oposición que recarga en quienes votaron por el No, la supuestas consecuencias de su decisión en algo que podría tacharse de revanchismo.
Revanchismo que se traduce en la definición de la Intendencia de Montevideo de un aumento importante en el precio del boleto. Aumento que no se consideró en enero con el aumento de las tarifas y que según lo consignado en la prensa se argumenta de la siguiente manera: “Este ajuste se da en el marco de un sistema de transporte público que ha enfrentado la mayor y más abrupta crisis de su historia, superando hasta en cuatro veces lo sufrido durante la crisis del 2002”.
Según lo expresado, la lectura de esta situación parecería indicar que hasta el 26 de marzo el sector del transporte no habría sufrido, motivo por el cual el precio de los boletos no ameritaba ser ajustado y que luego de ratificada la LUC la situación del transporte y el tema de los combustibles amerita un aumento de precio en el boleto (STM) descomunal.
En definitiva, parecería ser que la oposición remarca con este aumento que la decisión de la mayoría tuvo consecuencias nefastas para todos.
Nuevamente la sutileza de fracturar a la sociedad es brutal.