@|Que se adjudicara una a cada uno, fue muy bueno.
Una tablet en manos de un jubilado es como una ventana al mundo. Allí están los diarios con sus noticias, variedades, curiosidades y la posibilidad de conocimiento en una completísima enciclopedia con hermosas imágenes, además.
Cuando todo marcha bien, claro.
Porque, a diferencia de un tiempo más o menos cercano, ahora nos encontramos que su funcionamiento es súper lento en la búsqueda de redes que le alimenten. Apenas sucedido esto y logrado el tema propuesto, empiezan las interrupciones porque se ha suspendido la función Ibirapitá.
¿Puede ser que este sistema esté algo desatendido? ¿Será necesario que alguien autorizado tome cartas en el asunto para solucionarlo?
Si así fuera… los jubilados estaremos agradecidos. Somos muchos.