@|Recientemente me enteré de la iniciativa para construir un memorial dedicado a las ex presas políticas y como no comparto en absoluto esa idea, quería exponer a vuestros lectores los siguientes conceptos:
En primer lugar, creo que nadie desconoce el sufrimiento que estas mujeres han padecido en prisión. Torturas, violaciones, humillaciones y malos tratos de todo tipo. Por medio de los colectivos que ellas integran y también a través de las diferentes denuncias que individualmente algunas han realizado a la Justicia, hemos podido conocer a fondo los detalles de sus penurias en los diferentes lugares de detención.
En segundo lugar, también es bien sabido que el Estado Uruguayo, durante el gobierno del Dr. Tabaré Vázquez, reconoció la violación a los derechos humanos que sufrieron estas mujeres y las indemnizó económicamente.
En tercer lugar, dichas Señoras insisten en mostrarnos y hablarnos de sus penurias, según dicen para visibilizar su situación a las nuevas generaciones. Pero según mi punto de vista (como simple ciudadano que conoce la historia reciente) está faltando la otra cara de la moneda y nunca dicen por qué llegaron a estar presas. En mi caso particular, solo conocí a una presa política, una maestra de Parque del Plata que fue mi maestra en la Escuela Pública de dicha localidad y que, por supuesto, no daré su nombre.
Al año siguiente cayó detenida junto a su pareja por actos de sedición, los cuales nunca supe cuáles fueron. Pero lo grave de la situación es el recuerdo que tengo de las muchas horas en la cuales esta maestra nos hablaba y dictaba la historia de la Revolución China y todas las hazañas que había realizado Mao Tse Tung.
Esto sucedió en las aulas de una Escuela Pública de nuestro país por el año 1969. Quiero creer que el propósito era adoctrinarnos en las teorías del comunismo Maoísta aprovechando nuestras mentes infantiles y marcándonos que el camino correcto es la lucha armada como lo hizo Mao.
En el cuarto punto: ¿Uds. creen que una maestra que actuó de esta manera merece tener un memorial? Creo que no.
Según he leído en artículos periodísticos, las presas políticas serían unas 300 aproximadamente. Un porcentaje de ellas cometió delitos graves contra personas y/o instituciones, por lo cual, sería un gran error hacer ese memorial. Sería como hacer un monumento al terrorismo de los grupos y movimientos armados que actuaron en los años 60 y 70.
No pretendo extenderme más aunque el tema da para mucho análisis. Sí me gustaría que algún lector me diera alguna otra opinión, enfoque o ampliación. Agradezco a este medio por permitirme expresar libremente mi voz.