@|Quiero agradecer a todos los vecinos de todos los colores políticos de la ciudad de Nueva Helvecia y de distintas partes del departamento, como amigos a nivel nacional, que han estado presentes en esta situación de martirio que he vivido.
Esos que se acercaron a darme un abrazo, a darme el apoyo, a manifestar el tipo de persona que ellos consideraban que era.
Y eso no tiene precio, porque implica el valor humano de los otros.
Quiero agradecerles porque fueron mi único sustento, más allá de mi familia, para soportar la calumnia.
Cada mensaje, cada sonrisa, cada llamado, cada silencio respetuoso ha sido significativo. Y ayudó esa compañía de tantos.
A nivel personal hay un antes y un después del 3 de diciembre del 2021.
El archivo de la causa en Fiscalía y el archivo del caso denunciado en la Junta Departamental confirman lo que desde el inicio de todo esto sosteníamos.
Mi profesión me dio la enorme oportunidad de estar cerca de muchos jóvenes y familias que confiaron en 37 años de trabajo docente serio y honesto; he hecho lo que la Educación Física fomentó en mi formación como el trabajo en equipo y el respeto por los otros, cualquiera sea su condición.
La confianza de tantos fue valiosa. Y una importante herramienta de sostén.
No es fácil transitar por caminos como éste, pero seguro que ha sido uno de esos donde el aprendizaje es profundo: lo que uno no fue ni será jamás te golpea la frente y te somete a pruebas que a los 64 años recién se empiezan a descubrir.
Quiero destacar el valor de la familia que fue fundamental en todo este proceso. Con Silvia hace más de 40 años que estamos juntos; con muchos momentos felices y algunos de tristezas grandes que nos han hecho fuertes, porque el estar juntos nos ha motivado a siempre seguir adelante. Nuestras hijas, ese apoyo fundamental que han estado al lado, preocupadas para que esto no nos fuera afectar en la salud. O personas de más de 90 años que sufrieron lo que no era necesario.
En el tránsito de la vida, el estar rodeado del afecto familiar y del entorno, de esos niños que nos llenan la vida, es otro motivo para siempre agradecer.
No ha sido fácil.
Pero lo importante es que me ha dado la posibilidad y las ganas de ser más fuerte.
Gracias a todos.