Sobre la ex Ministra

Sebastián González | Montevideo
@|Es muy llamativo como desde el partido que dice estar del lado de “la gente”, “el pueblo”, que dice tener sensibilidad social, se intenta justificar los hechos en torno a las irregularidades respecto de la situación de la vivienda de la hoy, ex ministra Cairo, y sus consecuencias.

Desde el discurso de la propia ministra en su intento de “dar la cara” hasta los ensayos de defensa esbozados por sus “compañeros”, el denominador común es lo insólito.

Se han atribuido razones que van desde el haber tenido “otras prioridades” como la de no “haber nacido en cuna de oro”, para intentar dar sentido al hecho de que la ex ministra se haya colocado de manera voluntaria en una situación de precariedad desde el punto de vista jurídico. Somos muchísimos los uruguayos que no nacimos en “cuna de oro” y que tenemos “otras prioridades” sin embargo, quienes tenemos consciencia cívica, conocemos nuestras obligaciones.

Como consecuencia de ello, lo primero que dice la ex ministra es que este asunto implica una desvalorización de su propiedad, poniéndose en posición de víctima. La perjudicada es ella. Maneja con liviandad el tema al decir que por ello “no pagué un impuesto”, como si fuera algo que la toma por sorpresa (“me estoy enterando que parece que no pagué”) y como si fuera cualquier impuesto.

Ese impuesto que no pagó es, ni más ni menos, que el Impuesto de Primaria que financia la educación pública, la escuela pública, que su partido dice defender.