Uno de los grandes dramas que tiene el país es la situación de la gente que sale de la cárcel. Lejos de reconvertirse, en la mayoría de los casos egresan sin oportunidades, y en buena proporción pasan a engrosar la población de gente que vive en la calle. Un programa en acuerdo entre el Ministerio del Interior y la Universidad de Montevideo ha dado buenas señales, bajando la reincidencia en un 25% de los casos. Algo digno de apoyarse y replicar en otros lados.