La Clave
El futuro canciller Mario Lubetkin dijo que “priorizará” darle impulso a la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac). La verdad, una idea tan absurda como propia de otra época. La era en que ese tipo de foro político regional tenía alguna relevancia pasó hace más de 15 años. Ahora es apenas un rejunte de frustrados, donde gente como Maduro, Ortega o Petro, se juntan a rumiar resentimiento. Si esa es la prioridad del próximo gobierno, vamos mal.
La empresa de fertilizantes Isusa anunció una reestructura, que determinará pérdidas laborales. Es apenas la última de una serie de empresas que están anunciando ajustes, en la antesala de un nuevo gobierno. Ya se sabe que Uruguay es un país donde es muy difícil ganar plata. Pero si a eso le sumamos un ministro de Trabajo como Juan Castillo, la ecuación parece simple. Se vienen tiempos muy delicados para el mercado de trabajo en Uruguay. Un daño autoinfligido.
Una cosa queda en claro de algunos de los temas que marcan la agenda por estas horas en el país: la carencia absoluta de educación financiera que padecen los uruguayos. Desde el escándalo por los fondos ganaderos, hasta la salida de la empresa japonesa Yazaki, todo ese dolor se podría haber limitado, si la sociedad entendiera mejor las reglas con las que se maneja la economía. Se impone que el sistema político subsane ese déficit, pero... claro. A algunos eso no les va a servir.
La crisis de contaminación en las playas de Montevideo deja en evidencia el doble discurso que se suele manejar en estos temas. Los dirigentes políticos compiten diariamente por mostrarse como los paladines del medio ambiente, hablan de cambio climático, de acuíferos y de grandes causas. Pero cuando explota algo concreto, que está bajo su control y que tiene directa vinculación con la salud pública, nadie se hace cargo. Y las respuestas ante la situación dejan mucho que desear.
La reacción del jerarca del Pit Cnt, Marcelo Abdala, ante el anuncio de la empresa Yazaki de que se va del país, agrava un panorama ya complejo. Abdala sacó su mejor pose de malevo e insultó a la empresa por irse sin avisar. ¿Quería que le notificaran un mes antes? En vez de eso, debería preocuparse por la seguidilla de paros innecesarios que provocó en esas plantas, muy bien documentados en sus propias redes sociales, y que ahora dejan a miles de personas sin trabajo.
El anuncio de que la empresa japonesa Yazaki se va del país, dejando a mil personas sin trabajo, es una señal inquietante y reveladora. Según la empresa, el motivo son los altos costos y la cantidad de paros que afectan su funcionamiento. En el fondo, ambos aspectos están vinculados con el tema gremial, ya que, por la propia lógica actual de los consejos de salarios, los sueldos suben sin tomar en cuenta la productividad. Eso sí, con Juan Castillo de ministro, todo va a mejorar.
La debacle de Conexión Ganadera, más allá de la lógica preocupación de inversores y público en general, está generando situaciones ridículas. Desde gente que pasa factura de viejas cuentas personales con sus propietarios, pasando por abogados que salen en los medios buscando ganar plata con este drama, e incluso están quienes buscan ventajas políticas con el caso. Un detalle: esta empresa funcionó sin problemas durante 25 años, 15 de los cuales, fue bajo gobiernos del FA.
La noticia ya ni genera asombro, por lo habitual. Un motociclista falleció ayer, al chocar con una camioneta en los accesos de ruta 5 a Montevideo. La cantidad de accidentes fatales que involucran a motociclistas es inaceptable en un país como Uruguay. Y la cantidad de hechos menos graves, pero que dañan a familias y personas, por motos que conducen sin respetar las normas ni reglas básicas de seguridad, espanta. Las autoridades no pueden seguir ignorando el tema.
La noticia de que un soldado uruguayo en fuerzas de paz de la ONU resultara muerto y otros, heridos de gravedad, en el Congo, no ha tenido la repercusión que merece. Nuestros compatriotas están en ese atribulado país, intentando cumplir un rol fundamental para evitar derramamiento de sangre. Muchas veces mal, poco preparados para el clima hostil en el cual deben desenvolverse. Toda la sociedad uruguaya debería reflexionar y valorar lo que hacen nuestros compatriotas.
Dos mandatarios con debilidad por la demagogia, como son Donald Trump y Gustavo Petro, acaban de confrontar directamente. Petro se negó a aceptar un avión con deportados que estaban de forma ilegal en EE.UU.. Entonces Trump ordenó fuertes sanciones contra Colombia. La dignidad del país hermano, es muy atendible. No así el discurso panfletario de su presidente, que además no es capaz de percibir las consecuencias que pagará su país, por su impostada gallardía.
La crisis que ha impactado en una serie de fondos privados ganaderos conmueve al país. Es trágica la forma en que miles de uruguayos han visto afectados sus ahorros. Pero hay dos reacciones inaceptables. La de quienes reclaman que el Estado asuma responsabilidad por contratos entre privados. Y las que buscan aplicar vinculación política a un tema que es comercial. Esta última es sobre todo ruin, cuando viene de quienes dilapidaron muchos millones más del contribuyente.
Los datos oficiales muestran que el 2024 cerrará con la creación de más de 35 mil nuevos puestos de trabajo. Se trata de una cifra récord y que confirma que el período de la Coalición Republicana cerrará con números laborales muy positivos. Esto sólo aumenta los cuestionamientos sobre cómo no se lograron transformar esos números positivos en votos en noviembre. Y que pone la vara muy alta para el gobierno del Frente Amplio, que comienza en poco más de un mes.