Catalana independentista, escritora, periodista de izquierda, Pilar Rahola escribe regularmente en el periódico español "La Vanguardia". Tales antecedentes son de importancia al citar sus opiniones respecto de José Mujica, a quien conoció en Montevideo hace un par de años y que ahora ve convertido en candidato presidencial.

Lo recuerda como "el Pepe", un tupamaro "poco dado a las exigencias de la educación" y evoca cuando él le preguntó qué opinaría si hubiera organizado un comando para matar a Pinochet. Ella respondió: "Yo hubiera llevado a Pinochet a la cárcel. Usted a la tumba. A usted le mueve la venganza y a mí la justicia".

Lo define como "un revolucionario de manual, endiosado, ególatra, iluminado, convencido de su autoproclamada misión salvadora y sin problemas evidentes con la conjugación del verbo matar".

Un ser que reinventó el lenguaje para denominar a los asesinatos, "ejecuciones". Sencillamente un hombre que sigue las reglas democráticas, pero que no cree en ellas. Al respecto cita esta frase del candidato: "Participar en la democracia liberal no significa creer en ella". La compara con lo que proclaman algunos grupos españoles de la extrema derecha.

Pilar Rahola no puede ocultar su espanto al recordar que "decenas de uruguayos fueron asesinados por los tupamaros antes de la llegada de los militares" y que "Mujica no sólo no se arrepiente de ese pasado, ni ha desarrollado ningún atisbo de autocrítica, sino que lo glorifica como si fuera la crónica de un macabro éxito personal. Un currículum de violencia extrema, orgullosamente presentado, para un candidato a presidente".

Luego de varias reflexiones más, incluyendo lo que describe como la tibia posición oficial uruguaya ante terroristas y lo que llama "vasos comunicantes con Hugo Chávez", Rahola termina así su artículo: "Concluyendo pues, ¿puede Uruguay caer en manos de un extremista que no cree en la democracia? Si ocurre, ¿puede convertirse en otro satélite del chavismo? ¿Está ocurriendo ya? Preguntas siniestras para una hora difícil en el pequeño Uruguay. Todo puede pasar en estas elecciones. Pero algo de lo que puede pasar resulta inquietante."