SELECCIÓN
El elenco de Magnano hizo partido en el primer tiempo, pero se quedó atrás con el desgaste que le presentaba el juego del rival, lo cual no le permitió estar fino a la hora de encestar.
La selección de Uruguay cayó 85-66 ante Brasil en el gimnasio Pedracao en Franca y perdió el invicto en la segunda ventana de las Eliminatorias rumbo al Mundial de 2023. Pese a que los uruguayos comenzaron ganando y tuvieron un buen primer tiempo, el elenco de Gustavo De Conti se hizo fuerte conforme transcurrían los cuartos y la Celeste comenzó a cansarse.
Los dirigidos por Ruben Magnano se ubicaron segundos en la tabla con cinco unidades, cuatro ganadas ante Colombia, y la Canarinha sumó seis para ser el líder del grupo B, estando así un paso más cerca del Mundial de básquetbol 2023.
Ahora Uruguay deberá pasar de página y concentrarse en el duelo del próximo lunes ante Chile.
Primer tiempo
El primer tanto tardó un minuto y medio en llegar. Ambas selecciones tuvieron intentos en ese periodo de tiempo, pero fallaron, estaban acelerados. Una falta sobre Gonzalo Iglesias le dio a Uruguay la oportunidad de ponerse arriba a través de la pelota quieta y el jugador de Trouville no la desaprovechó. La Celeste llevaba la delantera 0-2; recién a los dos minutos y medio Brasil logró igualar el marcador.
Los primeros diez fueron para Uruguay, pese a la gran defensa que posee el elenco de Gustavo De Conti, los celestes se abrieron paso. La Canarinha estuvo casi todo el primer chico abajo gracias a una tarde muy buena de Parodi, goleador de este cuarto con diez unidades.
A falta de dos segundos, Brasil estaba dos abajo, pero una falta le permitió igualar el duelo en 14.
Brasil arrancó con más energía el segundo chico y pasó por segunda vez en el duelo a la Celeste. Los primeros cinco minutos fueron muy parejos y ambos elenco eran profundos, pero el duelo perdió dinamismo.
Faltando dos minutos la Canarinha puso primera y se puso a cinco, la máxima diferencia hasta el momento.
Joaquín Rodríguez intentó anotar en varias oportunidades para la Celeste, pero tenía dos enemigos: la defensa brasileña que corrigió aspectos respecto al primer cuarto y el estar un poco acelerado, lo cual no le estaba dejando definir con claridad.
El primer tiempo finalizó con Brasil siete puntos arriba, que hubiesen sido más de no ser por las tapas de Ducasse y los libres de Ubal. El cansancio de Uruguay se empezaba a notar.
Segundo tiempo
La diferencia física se hizo notar en el comienzo del tercer chico. Uruguay no podía ingresar al área y cuando lo hacía no definía con éxito. Brasil se empezó a alejar y se puso a doce puntos, aunque perdió varias pelotas.
Sobre el final la dupla Ducasse-Iglesias demostró cosas buenas frenando al rival. Pero faltaba mucho en el ataque y Parodi, quien había sido el goleador en el primer chico, no conseguía anotar.