NBA
La superestrella explicó que su presencia en la competencia se debe de manera exclusiva a los compromisos contractuales firmados.
A unas horas de que se lleve a cabo el Partido de las Estrellas (All Star Game de la NBA), el evento deportivo sigue causando controversia, después de que el jugador estelar, el alero LeBron James, de Los Angeles Lakers, calificara al partido "reinventado" por la liga y el sindicato de jugadores como "una bofetada en la cara".
La estrella de los Lakers considera que después de haberse cancelado todo el Fin de Semana de las Estrellas, que se iba a celebrar en Indianápolis por causa de la pandemia del coronavirus, el partido que se va a celebrar este domingo, en Atlanta, no tiene sentido.
Debido a las preocupaciones por el coronavirus, las festividades, que generalmente tienen lugar durante un fin de semana completo, se condensarán en un espectáculo de un día.
Cuando la liga anunció por primera vez su decisión de seguir adelante con la 70 edición del Partido de las Estrellas, algunos jugadores dijeron estar molestos porque consideraron que era una decisión irresponsable.
James coronó esas preocupaciones calificando este sábado al Partido de las Estrellas como una "bofetada en la cara" para toda la familia del básquetbol profesional.
Durante una conferencia de prensa el sábado, el comisionado de la NBA, Adam Silver, que ya fue criticado por haber adelantado la temporada 2020-21 al mes de diciembre en lugar de esperar al pasado enero, respondió a las preguntas sobre las críticas de James.
Silver, sin aportar los verdaderos motivos que llevaron a la NBA a cambiar su programación, tiró de "diplomacia" y dijo que "respeto su punto de vista, pero pueden ser problemas que se pueden resolver en la familia", argumentó el comisionado.
En ese sentido, Silver confirmó que había escuchado las preocupaciones del jugador de los Lakers e hizo todo lo posible para llegar a un compromiso.
No se permitirá que los aficionados asistan al evento y Silver dice que debe considerarse un evento "sólo para televisión" y con el único objetivo de seguir vendiendo el producto de la NBA a través del mundo y conseguir los ingresos por los derechos de televisión que están pactados.
"El mensaje dentro de la comunidad de la NBA es que vamos a estar operando en una mini burbuja de cara a cumplir con nuestros compromisos comerciales", reconoció Silver.
Agregó que "no habrá funciones de la NBA (en las que los aficionados) puedan participar. Agradecemos su apoyo y esperamos que vean nuestro Partido de las Estrellas en la televisión. Este es un evento sólo por televisión en Atlanta".
Sin embargo, todo el mundo que rodea a la NBA se ha dado cita en Atlanta y las fiestas privadas y los centros de diversión van a estar al completo durante todo el fin de semana.
Mientras que en el apartado deportivo, si en las ediciones anteriores el Partido de las Estrellas y los concursos no aportaban nada, este año será todavía más frustrante el comprimir todo un calendario de cuatro eventos en una sola noche.
James, que tiene promedios de 25,8 puntos; 7,8 puntos y 8,0 rebotes en su temporada 18 como profesional, aunque fue el más votado por los aficionados, los medios de comunicación y los periodistas, ya adelantó que su presencia en Atlanta se debe exclusivamente por la "obligación" contractual que tiene de acuerdo al convenio colectivo de asistir.
La estrella de los Lakers volverá a estar al frente del Equipo James, como su capitán, mientras que el alero Kevin Durant, de los Brooklyn Nets, aunque fue seleccionado como capitán en la Conferencia Este, no podrá disputar el partido al encontrarse lesionado.
Será la décimo séptima aparición en el Partido de las Estrellas en la carrera de James.