Por Enrique Arrillaga
Uruguay estará nuevamente ausente en el Mundial de básquetbol que se jugará entre el 25 de agosto y el 10 de setiembre en Filipinas, Japón e Indonesia y tras otro trago amargo con la eliminación de la Celeste se impone una pregunta: ¿Qué necesita la selección para clasificar a la Copa del Mundo?
Ovación consultó a cuatro exjugadores y referentes de la selección en diferentes épocas como Luis Eduardo Pierri, Oscar Moglia, Luis Silveira y Marcelo Capalbo.
Desde el diálogo a la planificación, pasando por el trabajo a largo plazo y las leyes deportivas que hoy no colaboran en nada para el desarrollo, los cuatro referentes aportaron su visión.
Luis Pierri, que supo ser capitán y campeón Sudamericano, comenzó diciendo que “obviamente hay muchas cosas para cuestionarse pero lo primero es entender que quizás este sea nuestro nivel y que cuando se logran pequeñas cosas son excepciones. Por ejemplo, lo que le pasó a Argentina es al revés: ellos siempre van y esta vez no lo lograron. Lo nuestro es lo contrario. Hace 37 años que no logramos clasificar. Quiere decir que algo pasa”.
“Hay una realidad y es que el medio deportivo basquetbolístico ha dejado de lado a históricos del deporte. Hay pocos referentes trabajando”, agregó el excapitán que hoy se desempeña como técnico en el básquetbol femenino. “Para mí no pasa por el entrenador. Ya se probó con extranjeros como el Che García en su momento. ¿Quién va a discutir a Magnano? Se cayó de la cuna el que lo discuta. Pero no pasa por ahí”, contó.
Oscar Moglia, campeón Sudamericano, remarcó que “para que vayamos al Mundial tienen que pasar un montón de cosas, pero primero hay que tener una planificación más larga, apuntando a los jóvenes para que tengan oportunidad de competir en otros lados y darle a la selección más competencia internacional porque no es un tema de quién sea el técnico, es un tema de planificación a mediano y largo plazo. El entrenador que viene no es mago, tiene que venir a hacer un trabajo serio. Yo no soy de la idea de los entrenadores extranjeros a no ser que venga un monstruo, que es algo imposible. Soy de los que piensa que en Uruguay hay excelentes técnicos con mucha capacidad como para ir a buscar a Magnano, algo que no entendí”.
Acerca del formato de la Eliminatoria —con ventanas—, Osky comentó que “pienso que nos favorece porque jugamos de local. A mí me hubiese gustado jugar así en mi época porque hoy podemos ser locales con nuestra hinchada y en casa”.
Moglia expresó que “si hacemos las cosas bien, hay chances. Está el problema de los jugadores grandes, pero siempre salen otros jugadores y algo fundamental es que cuanto más jóvenes se vayan al exterior teniendo talento y posibilidades, mejor va a ser para potenciar su nivel y el de la selección. Argentina cuando tuvo la generación dorada era porque todos estaban en el exterior y acá pasa lo mismo. Es un tema de competencia”.
Marcelo Capalbo está actualmente ligado a la selección por su rol como coordinador de las juveniles y en diálogo con Ovación redobló la apuesta y dijo que “yo creo que en lugar de preguntarnos qué necesitamos para ir al Mundial deberíamos preguntarnos qué hacemos para clasificar porque en esta nueva era tecnológica tendríamos que tener muchísima información y creo que Uruguay todavía no ha desarrollado toda su capacidad en cuanto a la gestión del deporte como otros países”.
“Y el qué hacemos no empieza en el momento que un chico llega a la selección juvenil o mayor. Esa es una parte de la historia. Hay una parte que es pura y exclusiva de rendimiento y detrás del mejoramiento del rendimiento y de la búsqueda del resultado deportivo, hay que tomar decisiones. Y a veces ese tipo de decisiones entran en una órbita que escapa a decisiones de un entrenador; son políticas de Estado”, remarcó Capalbo, agregando que “hoy para acceder a la excelencia de la competición deportiva se necesita excelencia en la gestión y este tipo de cosas van desnudando que el sistema deportivo uruguayo, con bases en el Siglo pasado, no está pensado para el deporte de alta competencia. Estamos bien en el deporte comunitario y escuelas pero nos faltan políticas de Estado para el alto rendimiento. La gestión deportiva es cada vez más desafiante, constante y dinámica. Es tan cambiante como el deporte y acá no está resuelto el deporte profesional. Las leyes que hay escapan al deporte de alta competición”.
Luis Silveira está muy vinculado al deporte comunitario por ser coordinador del Junior NBA que desembocó en Uruguay y tras la eliminación celeste contó que “siempre nos quedamos en la chiquita de que somos tres millones y no podemos. No es así. Debemos usar eso en el otro sentido: somos tres millones y tenemos que ser más eficientes y dejar de echarle la culpa a diferentes cuestiones para ver dónde se puede mejorar el reclutamiento en todo el país”.
Respecto a la selección, el Bicho contó que “en mi época con Uruguay teníamos un equipo que no contaba con un talento individual sublime. Sí había algunos muy buenos jugadores, pero que no competían en el nivel en el que hoy están varios de la selección. Pero había algo que nos distinguía y era el fuerte sentido de equipo y no digo que este plantel actual no lo tenga, pero es diferente por las ausencias que hoy se dan en la selección. En aquel momento se reclutaban muchos jugadores del interior que venían con buena competencia y eso hoy no lo tenemos en Uruguay”.
Silveira explicó que “ahora para poder ir a buscar esos jugadores hay que hacer cosas globales, planificar bien y dejar de llorar que apenas somos tres millones”.
¿Qué se tendría que hacer para mejorar y pelear por una clasificación al Mundial?
Respecto a los pasos que debería dar el básquetbol uruguayo tras una nueva eliminación del Mundial, Luis Pierri dijo que “lo primero es saber si los objetivos de los dirigentes, entrenadores y jugadores se cumplieron. Capaz que alguno está contento con lo que se hizo más allá de no clasificar a la Copa del Mundo. Lo segundo es tener una profunda autocrítica para dejar de tenerle miedo a la palabra fracaso. Hay que entender que es parte del destino para asumirla y hacer cosas diferentes. Y lo otro que necesita el básquetbol uruguayo es juntarse a dialogar, convocarse y no separarse porque unidos es de la única manera en la que se pueden lograr objetivos”.
Para Luis Silveira “falta reclutar, faltan lugares para jugar. Somos tres millones pero solo reclutamos en la capital. Hay que tener una mirada más amplia, mirar hacia el interior y lograr de una vez por todas una Liga Nacional, que es lo que hizo Argentina para ser potencia. Con una Liga Nacional no sé si llegaremos a ser potencia, pero vamos a avanzar seguro”.
Oscar Moglia enfatizó que “no conozco ningún país en el que se juegue todo el básquetbol en una misma ciudad. Tenemos distancias cortas y hay plazas fuertes en el interior. Necesitamos una competencia local fuerte con DTA, Metro y Liga al mismo tiempo. Pero para lograr esto se necesita cierto orden y por supuesto, planificación”.
Marcelo Capalbo cerró diciendo que “di vuelta al Uruguay entero y no hay un menor de 16 años que mida dos metros. Ese es un problema, pero también hay otros. Creo que hay que analizar qué nos pasó y cotejarlo para lo que necesitamos en el futuro y empezar a trabajar. Si queremos resultados diferentes, hay que hacer cosas diferentes pero hay elementos que en la selección son innegociables como el respeto y el compromiso”.