LIGA URUGUAYA
El jugador de Biguá analiza lo que fue la fase regular del certamen a la espera de los cuartos de final a los que el "Pato" ya está clasificado.
En una Liga Uruguaya de Básquetbol entrecortada y con muchos 20-1, Biguá logró meterse en los playoffs tras quedarse con los puntos luego de que un juvenil de Hebraica Macabi diera positivo de COVID-19 en la fecha número 11 del torneo. El “Pato” de Villa Biarritz finalizó cuarto en la tabla, pero con el mismo puntaje que el segundo, lo que le otorgó la calificación directa a los cuartos de final.
“Fue un torneo bastante raro, a causa del COVID-19 no nos tocó jugar la última fecha, lo que hizo que después dependiéramos de otros resultados para clasificarnos. La realidad es que no puede sacar una conclusión tan real porque algunos partidos no los jugamos porque nosotros teníamos casos y otros partidos los ganamos sin jugarlos porque los rivales los tenían” explicó Santiago Vidal, referente y jugador del “Pato” de Villa Biarritz, en diálogo con Ovación.
Para Vidal, un torneo programado para 35 fechas de las cuales solo se jugaron entre 10 y 12 partidos no es suficiente referencia del nivel que tiene su equipo ni ningún otro. “Yo creo que las posiciones finales tampoco reflejan la realidad de todos los equipos”, aseguró.
El coronavirus y las lesiones que tuvo que sufrir Biguá obstaculizaron el campeonato, pero aún así no fueron los más perjudicados. “Fue un campeonato muy complicado, nosotros además de las bajas por lesiones tuvimos casos de COVID-19, pero pudimos disimularlos porque tenemos un plantel un poco más largo que otros equipos. Hay clubes que les ha tocado todas las fichas juntas, los nacionales y extranjeros de forma simultánea y así se hace muy cuesta arriba”, declaró el basquetbolista y agregó que cuando los jugadores regresan de la cuarentena hay que estar atento a cómo evolucionan, y que todo depende de cómo atravesaron el coronavirus y en qué condiciones se encuentran al volver.
“Por ahora no tenemos ningún positivo, pero nunca sabés. Capaz que mañana o pasado te dicen que un compañero tiene el virus. No estás libre. Podés entrenar, sentirte bien, que el equipo vaya agarrando forma, hasta que de la noche a la mañana tenés que encerrarte entre 10 y 14 días. Es difícil pronosticar y hacer un balance. Hay que ir a entrenar, jugar, adaptarse, y saber que es un torneo especial”, expresó el base.
En este momento al “Pato” solo le queda esperar y prepararse para lo que viene. “Vamos a estar un tiempo parados hasta que se defina si nuestro futuro cruce es con Hebraica o Malvín. Ahora se para el torneo una semana y media y después juegan entre ellos el playoff, eso quiere decir que nosotros por veinte días vamos a estar parados, así que lo que nos queda es planificar los entrenamientos, ir recuperando jugadores que estuvieron lesionados o que hayan tenido coronavirus y rezar para que no nos vuelva a tocar en otra ocasión”.
A pesar de los contratiempos y dejando de lado las incertidumbres que aún puede provocar la pandemia, el club de Villa Biarritz se siente preparado y fuerte de cara a la ejecución de los playoffs de la Liga. “Nosotros creemos que tenemos potencial como para jugar bien y mostrar que somos un equipo fuerte, pero todo se puede desestabilizar, es lo que les ha pasado a la mayoría de los equipos”, declaró el “Pepo”, y agregó que también han atravesado muchos pormenores que pueden dificultar la decodificación de su verdadero potencial.
“Hay que llevar el campeonato día a día, tenemos que tener suerte de que no nos toquen lesiones ni COVID-19 y estar en un momento iluminado durante este mes y medio de competencia que queda para demostrar que el equipo tiene el poderío como para que las cosas funcionen”, concluyó Vidal.