ELIMINATORIAS

La Blanquirroja, la barra oficial de la selección peruana, expresó su malestar conlos precios fijados por Uruguay para el decisivo partido por Eliminatorias con una frase que reflejó una rebeldía que se hizo piel en los futbolistas incaicos. “El partido ya empezó, nos vemos en marzo”, escribieron en Twitter. Y como si fuese un reflejo, de esa acción, Gianluca Lapadula le puso fin a su conflicto con el técnico del Benevento, Paolo Guerrero viajó a Estados Unidos para avanzar en la recuperación de su rodilla y Jefferson Farfán quedó pronto para poder jugar en Alianza Lima.

Los tres lo tienen bien claro. Son jugadores referentes de Perú y no pueden quedar afuera de una contienda que les marcara la vida, como lo supo reconocer el mediocampista Renato Tapia, uno de los jugadores que fue visitado por el técnico Ricardo Gareca para procurar que ponga el foco lo más que pueda en las dos contiendas que se le vienen por delante a los incaicos.

Pero está claro que lo más significativo viene por el lado de los hombres de arriba. Gareca ya puede comenzar a respirar mejor, porque Lapadula, el jugador que tiene 18 partidos internacionales con Perú y marcó 6 goles, está dispuesto a realizar lo que sea con tal de meterse en el combinado que pisará el Centenario el 24 de marzo.

Para empezar le puso fin a su conflicto con el club italiano. Y así lo confirmó Oreste Vigorito, presidente del Benevento, quien destacó que el delantero volvió a entrenar con el resto del equipo “y su caso ya está solucionado”.

El futbolista había dicho que quería marcharse por un entredicho con el DT, pero al final se puso a disposición del equipo y el club también abrió las puertas. Si la bronca queda de lado de los dos lados, Lapadula podría llegar al combinado peruano luego de haber completado una agenda de siete partidos. El primero de ellos está marcado para hoy ante Calcio Como.

Si eso no fuese así, el jugador está dispuesto a hablar con el club para partir antes hacia Lima y poder trabajar con Gareca y unirse a los trabajos que está haciendo Yoshimar Yotún, futbolista que todavía no tiene equipo.

Con Lapadula arriba, como lo supo remarcar a Ovación Sergio Markarian, Perú es un equipo más peligroso. Y eso podría incrementarse si el “Tigre” comprueba que el esfuerzo de Paolo Guerrero dio resultado.

El goleador histórico de la blanquirroja (39 tantos en 107 cotejos) tiene toda la intención de sumarse al combinado para el crucial cotejo ante la Celeste. Actualmente se encuentra en Estados Unidos trabajando con personal trainer para ponerse al 100% de las condiciones físicas. Si bien es cierto que le faltará ritmo futbolístico, trabaja desde diciembre en la recuperación del problema que se le presentó en la rodilla. Guerrero es un jugador de gran temple que siempre responde en las difíciles, por lo que podría dar una gran mano.

El otro integrante de una armada ofensiva que seguramente generará gran expectativa entre la afición incaica es Jefferson Farfán.

La “Foquita”, jugador de 27 goles en la Selección (102 cotejos internacionales) dejó de lado los inconvenientes físicos que no le permitían jugar desde el 16 de noviembre de 2011. Ese día ante Venezuela al menos disputó dos minutos. En el cotejo anterior, ante Bolivia en cancha estuvo 21 minutos.

Todo Perú sabe que la calidad de Farfán está intacta y que sin problemas puede transformarse en un jugador clave para cualquier contienda. Por eso se estima que el domingo 6 de marzo Farfán dispute el partido que Alianza Lima tiene marcado ante Sporting Cristal. Esa es una manera de ir poniéndolo a tono para la Selección.

En lo que respecta a Yotún, otro jugador que ha dado muestras sobradas de rendir en la alta exigencia deportiva, está entrenando en la Villa Deportiva Nacional. El pasado sábado disputó un amistoso entre la Sub 20 de Perú y un conjunto alternativo de Universitario.

El volante de 31 empezó a realizar este tipo de trabajos para y evitar que un proceso de inactividad le termine alejando de la posibilidad de defender a su combinado en el choque ante Uruguay.