CATAR 2022
Darwin Núñez fue el jugador más incisivo que tuvo la Celeste mientras que Diego Godín fue el más regular de la defensa.
Brasil venció a Uruguay 2-0 en el Estadio Centenario y quedó con 12 puntos en cuatro partidos jugados en las Eliminatorias Sudamericanas. A continuación te presentamos el uno por uno de los jugadores celestes.
Cuesta encontrar una figura en Uruguay ya que el rendimiento de los celestes fue parejo y no hubo ninguno destacado. En ese marco, Darwin Núñez fue de los más regulares e incisivos a lo largo del encuentro.
El artiguense, que sustituyó a Luis Suárez, empezó el encuentro muy concentrado y mentalizado. Pudo abrir el marcador a los 4’ con un enganche y un fuerte remate, pero la pelota pegó en el palo.
En el primer tiempo se asoció bien con Nicolás De la Cruz, jugó la pelota con criterio, y en el complemento fue el que más intentó, aunque en general fue bien controlado por los defensas de Brasil. Cerró una correcta actuación.
No tuvo responsabilidad en ninguno de los goles de Brasil. Además, le sacó un mano a mano a Firmino. Después no tuvo mucho trabajo.
Alternó entre buenas y malas durante el juego, pero se lo notó con muchas ganas y actitud. Le tocó bailar con una de las más feas como defender a Richarlison.
Empezó bien el partido, marcando mucho y jugando con concentración. Después de los goles de Brasil se ofuscó y no volvió a mostrar su nivel.
Pese a que por momentos del partido fue algo desprolijo, sacó muchas pelotas y anticipó algunas. Jugando con Giménez al lado, eleva su rendimiento en la Celeste.
En los primeros minutos Brasil buscó atacarlo por intermedio de Jesús, pero respondió. La jugada del primer gol llega por su sector. Aceptable.
Bajo rendimiento del jugador del Cagliari, acusando el cansancio del partido con Colombia. Entreverado e impreciso. Levantó un buen centro que casi termina con gol de Cavani en el primer tiempo.
Aunque también acusó el cansancio de Barranquilla, se las ingenió para bancar la mitad de la cancha. Fue sustituido cuando entró Mauro Arambarri.
Quizás fue en el que más se notó, junto a Cavani, su despliegue en Colombia. No tuvo protagonismo en el juego, perdió pelotas y no pudo incidir en el partido.
Cuando tocó la pelota, en general lo hizo bien (pases acertados); pero estuvo bien marcado y sus participaciones fueron esporádicas en el juego.
Discutió más de lo habitual. En el primer tiempo tuvo un aceptable rendimiento, un cabezazo afuera, pero fue bajando su rendimiento. Vio la roja a los 70’.
El jugador del Getafe entró a meter pata a los 60’, más todavía con la roja de Cavani. Por momentos lo logró, en otros fue superado por los norteños.
Entreverado. El futbolista que juega en la MLS no pudo gravitar en el juego de anoche. Perdió algunas pelotas y no pudo superar casi nunca a su marcador.
Jugó pocos minutos y no pudo desequilibrar. A su vez, apenas ingresó Uruguay quedó con 10 y eso lo obligó a replegarse unos metros en el campo.