A puro ímpetu: Peñarol avanzó a su primera final del Torneo Intermedio y espera por Nacional o Danubio

Diego Aguirre pateó el tablero, puso a Matheus Babi a cinco del final y, en tiempo adicional, el brasileño marcó el gol que vale por un pasaje a la definición. Hoy conocerá a su rival.

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Damián García celebra el gol de Peñarol junto con Matheus Babi, la figura del partido ante Defensor Sporting.
Damián García celebra el gol de Peñarol junto con Matheus Babi, la figura del partido ante Defensor Sporting.
Foto: Leonardo Mainé.

Fue puro ímpetu y poco fútbol. No logró ser el Peñarol vistoso de aquel Apertura que ganó de forma invicta. Tampoco el de los dos últimos partidos ante Fénix y River Plate donde había tenido destellos de mejoría, pero le alcanzó para lograr los dos objetivos que se había fijado en esta fecha: avanzar a la final del Torneo Intermedio y asegurarse al menos mantener la diferencia en la cima de la Tabla Anual.

Defensor Sporting se lo puso difícil desde el arranque: le quitó la pelota y le hizo mucho daño por los extremos, sobre todo por las incursiones ofensivas de Anderson Duarte, la figura del primer tiempo. El tacuaremboense ganó todos los duelos por banda y, a los 13 minutos, celebró lo que parecía el 1-0 parcial. Sin embargo, Mathías De Armas lo terminó anulando a instancias del VAR por entender que hubo falta previa sobre Javier Méndez. La decisión generó polémica y todo el plantel del Tuerto, incluido Álvaro Navarro, le reclamó al árbitro.

Lejos de nublarse por esa acción, la visita mantuvo la intensidad y sacó rédito del planteo inicial de Diego Aguirre, que mantuvo el doble “9” y sufrió por las bandas.
El Ojito Rodríguez reventó el palo en el tiro libre y Duarte volvió a avisar apilando jugadores de izquierda a derecha, pero el gol no llegó.

Ya en el segundo tiempo, Aguirre pateó el tablero: sacó a Facundo Batista y volvió a su esquema habitual con Lucas Hernández como extremo por izquierda y Maxi Silvera como único punta. Con el impulso de su gente, Peñarol generó situaciones, sobre todo cuando Leo Fernández tomó la pelota y exigió a Kevin Dawson, que le sacó varias opciones de gol.

De repente la hinchada levantó el tono pidiendo ganar el partido y llegó el gol de Wanderers ante Deportivo Maldonado que lo estaba dejando afuera de la final. El aliento se intensificó, Aguirre siguió buscando soluciones desde el banco y en primera instancia entró el Cepillo González. A cinco del final, no se percibían goles por ningún lado y el DT apostó fuerte: sacó a Maxi Silvera y puso a Matheus Babi, que terminó siendo el héroe inesperado al darle el pase a la final en tiempo adicional. Hoy se sabrá si habrá o no final clásica el próximo domingo. Será la primera definición del Intermedio que dispute el Mirasol.

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