Por Enrique Arrillaga
Hay jugadores que luego de varios años de reconocida y exitosa carrera en el fútbol internacional pueden darse el lujo de tomar decisiones que se acercan más al amor por los colores que a millonarias sumas de dinero y sin importar la edad. Los casos son pocos, pero el de Abel Hernández es para destacar en Peñarol.

Para empezar, el delantero de 32 años se negó a ir a otros mercados en enero para poder firmar con el mirasol, algo que generó molestia en su representante pero que lo acercó nuevamente al club de sus amores, donde ya había jugado en la temporada 2008-2009.

Desde ese entonces, Abel siempre quiso volver y a pesar de haber vestido la camiseta de equipos como Palermo de Italia, Hull City de Inglaterra, CSKAMoscú, Al-Ahli, Inter de Porto Alegre, Fluminense y Atlético San Luis de México, quería ponerse otra vez la de Peñarol.

Lo logró en enero y no todo fue color de rosa. El delantero se sumó al plantel de Alfredo Arias y tuvo poca participación en la pretemporada. Solo jugó dos partidos de los cuatro que disputó el carbonero antes del estreno oficial.

¿Qué le pasó? Abel Hernández sufrió la inflamación en uno de sus tobillos en la pretemporada y mucho se habló sobre eso.

Desde Peñarol contaron a Ovación que “él tenia una lesión en el tendón de Aquiles que arrastraba desde antes, pero en el otro pie y de eso está perfecto”. “Lo que le pasó ahora fue que se le inflamó el otro tobillo. Desde la sanidad se le dijo que esperara a que se desinflame y que parara para luego seguir de largo, pero no quiso parar para estar a la orden”, agregaron.

Foto: Archivo El País.

Lo cierto es que en la primera fecha del Torneo Apertura Abel pudo estar a la orden, pero en el banco de suplentes y sin ingresar.

“Se le recomendó parar una semana entera y perderse un partido y él solo quería jugar. Dijo que no lo pararan porque quería estar a la orden y poder jugar, cosa que desde Peñarol valoramos y mucho”, le contaron a Ovación fuentes aurinegras consultadas acerca de la situación que vivió el jugador que no tuvo minutos ante Cerro —ocupó un lugar en el banco de suplentes— y sí los tuvo desde el inicio el lunes frente a La Luz, partido en el que sumó 60 minutos en el Estadio Centenario.

Pero como por si eso fuera poco, mientras el delantero aún no termina de estar al cien por ciento de sus posibilidades físicas y futbolísticas, en las últimas horas le llegó una millonaria oferta del fútbol de China.

El club Changchun Yatay de la Súper Liga china le ofreció al delantero de 32 años un contrato de 4,2 millones de dólares por dos temporadas —más de 180 mil dólares por mes— más bonus por premios, goles, anotados, partidos y títulos ganados, algo que pocas veces es difícil de rechazar.

Foto: Juan Manuel Ramos.

Abel ya firmó su contrato con Peñarol y legalmente no podría irse, pero también tomó una decisión personal: quedarse en el equipo mirasol más allá de la importante suma de dinero que le ofrecieron desde China.

Según supo Ovación, la oferta llegó por escrito pero el futbolista ya sabe que no se irá porque optó por quedarse en Peñarol.

Desde el club dijeron a Ovación que “reglamentariamente no podría irse, pero ya sabemos que tampoco quiere irse de Peñarol porque se siente a gusto en el club y quiere jugar y tener sus partidos que fue lo que eligió a principio de año”.

En el entorno del jugador también destacan que está contento en Uruguay, disfrutando de estar en el club.

Abel Hernández continúa demostrando su amor por Peñarol con hechos concretos fuera de la cancha. Ahora, su siguiente paso será responder dentro del campo de juego y para eso se sigue entrenando sin parar en Los Aromos.