Alan Matturro, reconocido con el Balón de Plata del Mundial Sub 20 que Uruguay ganó en Argentina, tuvo una tarde para el olvido en el fútbol de Italia.

Este domingo, el uruguayo saltó a la cancha sobre los 87 minutos para reforzar la defensa y ganar en altura cuando el partido estaba 2-1 en favor de su equipo, Genoa.

Sin embargo, los planes no le salieron de acuerdo a lo que esperaba el entrenador y tres minutos después de su ingreso, a los 90' y tras un envío desde el tiro de esquina, el defensor impactó la pelota de cabeza y se terminó convirtiendo el gol en su propio arco.

La inesperada jugada le cambió la ecuación al Genoa, que se había puesto en ventaja sobre el final del primer tiempo gracias a un doblete de Albert Guomundsson. Finalmente el resultado cerró 2-2 y ese impacto terminó siendo clave.

Matturro había tenido un aceptable debut ante la Roma el pasado fin de semana, donde jugó como carrilero por izquierda y posteriormente intercambió su camiseta con Paulo Dybala.

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