Por Sofía Berardi
Las palabras “Montero”, “Juventus” y “selección uruguaya” suelen relacionarse para cualquier amante del fútbol. Alfonso (16) es parte de la tercera generación de los Montero que juega al fútbol y lo hace sin ninguna presión, aplicando los consejos de su padre Paolo, a quien le apena no haber visto jugar.

El juvenil de 16 años es parte del plantel de la selección uruguaya Sub 17 -una categoría mayor a la que le corresponde- y participará del Sudamericano en Ecuador (30 de marzo al 23 de abril). Será su primera citación en torneos oficiales, luego de participar de los campeonatos amistosos en Alemania y Argentina. Aquella vez la lista lo sorprendió al aparecer en Twitter, esta vez recibió la noticia por mail. Se le notificó el 15 de febrero, pero debió esperar porque Juventus no quería que se perdiese tantos partidos.

“Este Sudamericano es más importante y hace que el orgullo sea mucho más grande. En lo grupal queremos hacer un buen Sudamericano y poder cortar la sequía de Uruguay, que hace tres Mundiales Sub 17 que no va; individualmente aportar donde me toque y sumar la mayor cantidad de minutos”, expresa Alfonso en diálogo con Ovación.

Dio sus primeros pasos en el baby La Escalinata y se formó en Defensor Sporting, donde le gustaría volver algún día. Ahora juega en Juventus y en la selección. Los primeros días de entrenamiento con la Celeste fueron un déjà vu, según dice, porque los sintió como “volver a diciembre”. Montero no sabe dónde se colocará en la cancha, porque en Argentina jugó de lateral y en Alemania de zaguero (al igual que esta semana en el amistoso con Bolivia), pero sí sabe qué quiere Diego Demarco, su DT. “Me pide que dé una mano como defensa o lateral y que esté a disposición”, explica Alfonso, y añade: “Me siento más cómodo de defensa, pero lo que más me gusta en el lateral es que subo más al ataque. La primera práctica me costó un poco, pero ahora es normal”.

Francisco Flores/Archivo El Pais

Desde el año pasado es citado en una categoría más grande (es 2007), pero no cree dar ventaja, salvo por el físico. “No tengo tanta musculatura como los defensas, pero después de eso nada. Me tratan como si no hubiese ninguna diferencia y son un equipo muy lindo”, sostiene.

Alfonso jugará con la misma zaga que lo acompañó en su inicios en la Sub 17 y eso le da tranquilidad. Consultado por si le sorprendió algún compañero dijo que no, pero destacó al defensa Patricio Pacífico (Defensor Sporting). “Contra Bolivia me gustó mucho como jugó. Es un animal. Es muy tiempista, cierra muy bien y con pelota es muy seguro”, opina. La Celeste viajará a Ecuador con el Sudamericano Sub 20 muy fresco en la cabeza de cada uruguayo, lo que hará inevitable la comparación, pero los subcampeones suscitan motivación para la categoría menor. “Demostraron que Uruguay siempre puede pelear en lo más alto, ellos son un ejemplo”, asegura Alfonso.

Foto: Prensa Juventus.

En enero de 2023 Alfonso se unió a la Sub 16 de Juventus, club en el que su padre se convirtió en ídolo y en el que hoy es técnico, dirigiendo al equipo Primavera. Su categoría está al mando de Claudio Rivalta, que fue internacional con Italia

La propuesta le llegó a principios de año. “Mi padre me hizo llegar que un agente de la Juve me vio en algunos videos y justo estaban buscando un defensa”, confiesa Alfonso, que aprendió italiano en 2020 cuando vivió en el país en forma de bota y reconoce que existe diferencias. “Pichincha (el complejo de Defensor) tiene lindas canchas, pero el complejo de Juventus tiene como ocho canchas en buen estado, el gimnasio está muy bien. Se nota que hay una diferencia entre Italia y Uruguay. También las hay en el salir jugando, la dinámica de ida y vuelta, lo táctico, el cómo presionar”. Sin embargo, en cuanto a lo técnico, sostiene que no hay tanta diferencia entre un país y otro.

Alfonso era capitán en Defensor y en dos meses en Juventus se calzó la cinta siendo extranjero. “Fue porque el capitán se fue con la selección, justo hubo una votación esta semana y mis compañeros me votaron. Creo que esa fue la mayor razón para que el DT me diera la cinta”, explica Montero, que sacó conclusiones de la elección: “Me hizo darme cuenta que ya estaba integrado en el grupo y también es un orgullo muy grande, porque ser capitán de la Juve es algo, que uno que es hincha como yo, sueña desde chico”.

Ser nieto de Julio (exvolante multicampeón con Nacional, dos veces mundialista con la Celeste y campeón de la Copa América 1967) e hijo de Paolo (exjugador de Peñarol, la selección e histórico de la Juventus) no es fácil en el fútbol, pero no hay presión para el pequeño de los Montero.

Foto: Archivo El País

“Presión para nada, yo veo como un orgullo que familiares hayan podido triunfar en el fútbol. A mí me gustaría seguir sus pasos y triunfar en mi carrera también”, dice Alfonso, que no vio a su padre en vivo, pero sí en grabaciones.

“Siempre que puedo veo videos, aunque se me complica porque la mayoría son de patadas, pero alguna que otra jugada encontré”, dice entre risas. Montero tiene un juego más elegante y se define a sí mismo como alguien al que le gusta ir fuerte, pero no tan así. “Me definiría como alguien que le gusta sacarla limpita de abajo, salir jugando, tomar riesgo con y sin pelota”, añade.

Foto: archivo El País.

“Los valores tienen que venir de la casa”, había dicho Paolo Montero en una nota a Ovación en 2022, del dicho al hecho, hay un trecho, pero el padre de Alfonso cumplió y basta cruzar unas palabras con el futbolista de 16 años para darse cuenta de los frutos de una buena educación. “No es solo fútbol, me enseñó muchas cosas de la vida, él y mi madre, de lo que está bien y mal”, comenta Alfonso.

FRANCISCO MONTERO

“Mi hermano tiene 18 años y acaba de firmar en Alessandria (a 45 minutos de Torino), juega de lateral o medio y es zurdo. Es mucho mejor que yo técnicamente”, asegura Alfonso sobre Francisco.

Foto: Archivo El País

Respecto a un referente, no nombra a Sergio Ramos ni a Van Dijk, sino a un holandés de la Sub 23 de Juventus: Dean Huijsen. “Maneja muy bien los perfiles, es muy seguro, lo admiro por la facilidad que tuvo, solo en seis meses en Primera y lo subieron a la Sub 23”, explica.

Foto: @deanhuijsen

Además del Sudamericano, su objetivo a corto plazo es pasar a la Sub 17 de Juventus y enero de 2024 lograr convocatorias a Sub 19. “Y por qué no debutar ahí y sumar minutos”.