Alvaro “Chino” Navarro está enfocado en el presente deDefensor Sporting. Quiere ir partido a partido, trazándose objetivos inmediatos para que el equipo se mantenga en Primera División.
“Lo primero es Defensor, hacer un par de goles más, que siempre es lindo festejarlos y después se verá”, respondió a la consulta sobre hasta cuando planea jugar.
Por momentos, ve su futuro más afuera que dentro de la cancha y en el último año el retiro estuvo en su cabeza. Sin embargo, en la última fecha que terminó en empate 1 a 1 con Boston River dejó claro que su magia goleadora sigue intactay por eso está entre los máximos anotadores de la historia reciente de los violetas.
En un plantel joven, el Chino, es uno de los más experimentados. “Soy el abuelo de todos. Tengo 37 y la mayoría tiene 17, 18, 19”, dijo a Ovación con una sonrisa.
Sin embargo, no le pesa en sus vínculos: “Soy padre de un adolescente de 14 años y más o menos sé cómo se comportan a esa edad: qué hacen, a qué juegan. Tengo mucho diálogo y me junto con ellos, no me aparto por ser más grande y me sumo a las jodas”, reveló.
Eso no lo exime de aconsejarlos: “Les digo que disfruten el día a día y que valoren lo que es estar en Defensor, que valoren en el club que están. Les digo que cuando se vayan se darán cuenta dónde estuvieron y lo lindo que estar acá”, comentó.
El Chino cree que en 2022 será su última temporada y ve su futuro, no tan lejano, como técnico. “Tengo el curso aprobado y cuando lo hacés empezás a ver las cosas de forma diferente. Detectás lo que antes no veías”, señaló.Tengo más o menos el cuerpo técnico pensado, con el “profe” (Luis Alberto) Mena hablamos todos los días y conversamos de táctica, juego, pero de a poquito, todavía estoy pensando en Defensor”, detalló.
Goles que quedan para la historia
Álvaro Navarro es uno de los grandes goleadores del siglo XXI en Defensor Sporting, con 67 tantos. Varios de ellos, marcaron la historia de los violetas. Sin embargo, existen al menos dos que tienen un lugar especial en el corazón del Chino. “Creo que uno de los que más me marcó fue el primero que hice en mi carrera profesional, cuando le ganamos a Danubio 6 a 1 en el Estadio”, reveló el delantero sobre la anotación que marcó su futuro en el Tuerto en aquella goleada del año 2003. Y detalló: “Hay muchos goles que son lindos y especiales, pero siempre te quedás con ese primero, de cuando subís que tenés la expectativa de niño, de jugar en primera y llegar. Hacerle ese gol a Danubio fue muy lindo”. El otro, está vinculado con copas internacionales, cuando en 2007 marcó contra Flamengo para la llegada del equip a cuartos de final de la Copa Libertadores de América.
2003. Danubio 1 Defensor Sporting 6. Gol de Álvaro Navarro. #FuerzaChino pic.twitter.com/l7WxhczhhX
— Tuerto Retro (@tuerto_retro) April 8, 2019
El descenso y el ascenso desde adentro
Tras jugar en el exterior, el Chino Navarro volvió a Defensor Sporting en 2018 y continúa jugando, entre otras cosas, porque se siente hincha del club. Le tocó vivir muchas buenas, pero también malas como el descenso en 2021.
“Pasan muchas cosas siempre que hay un descenso, sucede por algo. Creo que hubo muchos cambios en el club: técnicos, jugadores, dirigencia. Eso se sintió”, reflexionó el delantero.
Sobre cómo se dieron las cosas, rememoró: “Estábamos centrados en entrar en la Copa Sudamericana y no pensamos en que estábamos cerca de descender; las últimas tres o cuatro fechas, cuando realmente nos dimos cuenta que podía pasar eso nos agarró contra un equipo como Boston River, más acostumbrado a vivir estas situaciones y terminó costándonos un descenso que no esperábamos”.
Para el goleador, la etapa en la “B” fue “dura y larga” porque todos los equipos eran fuertes.
“Uno piensa que, tal vez, Defensor, Danubio o Cerro, equipos de primera no iban a tener mucha resistencia para subir, pero fue una temporada muy regular para todos. Al mismo tiempo, teníamos la obligación de ganar cada partido por ser Defensor. Creo que eso fue una mochila extra que cargamos al principio y que a lo último nos sacamos y logramos subir”, sostuvo.
El campo de juego del Estadio Charrúa incidió también: “La cancha era más rápida y se emparejaba mucho más. Había equipos que no salían, se cerraban al contragolpe y era más difícil entrarles”, subrayó.
Respecto la crisis institucional que vivió el equipo, que terminó con la salida del cuerpo técnico de Leonel Rocco y nueve jugadores separados del plantelcontó: “Pasaron cosas complicadas. Cuando pensás en los compañeros que separaron o los veíamos entrenar separados y me pregunté: ¿por qué no me tocó a mi? Fueron días y semanas complicadas.
Más allá que se terminó ascendiendo y fue bueno para el club, creo que vivimos momentos difíciles, en los que nos juntábamos en la casa de uno u otro, todos juntos, y llorábamos. No pensábamos que nos tocaran vivir en el fútbol”.
El presente
Los resultados no acompañaron al rendimiento deportivo de Defensor Sporting y el goleador es consciente de ello. Sin embargo, espera que el equipo empiece a demostrar lo que prepara semana a semana en los próximos partidos.
“El objetivo inmediato es River. Siempre hay que ponerse objetivos a corto plazo y el próximo partido es fundamental. Queremos sumar y demostrar lo que trabajamos en la semana. Tuvimos mala suerte con Plaza Colonia, hicimos un buen partido, y lo mismo pasó el otro día con Boston River, que no pudimos llevarnos los tres puntos”, concluyó.
El fútbol donde se sintió más cómodo
Además de ser uno de los goleadores y referentes de Defensor Sporting, Álvaro Navarro pasó por equipos de Argentina, Chile, México, Brasil y Ecuador.Sobre dónde se encontró mejor jugando al fútbol reveló: “Creo que en Brasil fue en el lugar donde me sentí más cómodo y pienso que me agarró una edad ya maduro con 30 años”. En 2015, el Chino se sumó al Botafogo que militaba en la Segunda División del Brasileirao. “Es un fútbol donde se juega pensando en el delantero, entonces me tocó la suerte de llegar y que el equipo viniera cuarto o quinto y el profe me pusó de entrada y hacer goles”, contó. Y relató: “Fueron 13 o 14 partidos en los que hice nueve goles, me fue muy bien y el equipo ascendió”. En su análisis de cómo se sintió, reflexionó:“Creo que fue en el lugar donde me sentí más cómodo porque los brasileños con su técnica lo que te hacen es dejarte siempre mano a mano y buscan siempre al nueve”.