TORNEO APERTURA

Si alguien mira solo el tanteador y se queda con eso, dirá que Nacional perdió dos puntos ayer con Rentistas. Más si es en la previa al clásico con Peñarol y si encima hoy puede perder la punta del Torneo Apertura si Plaza Colonia vence a Cerro Largo.

Es difícil para un equipo grande en este país sostener que un empate contra un equipo en desarrollo fue un buen resultado, pero lo de ayer se puede tomar como una muestra de ello.

El tricolor tuvo todo para perderlo. Todo. Cuando tenía 11 jugadores en cancha, ya Rentistas le estaba generando varios problemas de cabeza. Mucho más aún cuando Armando Méndez vio la tarjeta roja a los 36 minutos.

El equipo de Alejandro Cappuccio no pudo disimular nunca esa ausencia y eso se sumó a algunos pobres rendimientos individuales en el mediocampo.

Los últimos 10 minutos del primer tiempo fueron fatídicos para Nacional. Quedó con uno menos y Rentistas, luego de buscarlo por todas partes, llegó a la igualdad gracias a buen disparo de Emiliano Villar desde el borde del área y que se metió contra el palo de Martín Rodríguez.

Y eso que el tricolor arrancó con viento a favor. A los 11 minutos Gonzalo Vega quedó de cara al gol, tras un pase de Alfonso Trezza que tomó la pelota en posición adelantada, y no tuvo piedad. Sacó un zapatazo inatajable para el arquero y decretó el 1-0. ¿Polémica en puerta? Fue offside, sí. Con VAR se cobra, pero no fue un escándalo. Ni siquiera los jugadores de Rentistas protestaron. Apenas una pierna quedó en posición adelantada y en una situación muy fina de detectar para el ojo humano de un asistente.

En el complemento Nacional intentó acomodarse en cancha, pero solo encontró algo claridad en la zurda de Andrés D’Alessandro, buscando clarificar la ofensiva del equipo en un mediocampo que no funcionó de la mejor manera.

Las mejores situaciones fueron todas para el local. Tampoco fue que transformó en figura a Rodríguez. Si no lo ganó fue más por falta de puntería de los atacantes que por salvadas espectaculares del arquero tricolor.

Los últimos minutos del partido se jugaron en el área de Nacional. El “Bicho Colorado” no se conformó nunca con el empate y se pareció, en parte, a aquel que dirigió Cappuccio el año pasado y se ganó los elogios de todos. Martín Varini apostó por el triunfo y lo fue a buscar. Estuvo muy cerca. Le perdonó la vida.

Fue empate y por la manera en que se dio el trámite, Nacional ganó un punto. Tal vez al cierre de este Apertura o al final del Uruguayo mirando la Tabla Anual se pueda darle valor a esta igualdad que, lógicamente, ayer nadie festejó.

Rentistas fue el que asumió los riesgos. Nacional jugó uno menos gran parte del juego, pateó al arco una vez sola en 55 minutos y al final del todo, la sacó barata...

Nacional hizo agua en la mitad de la cancha. Gabriel Neves no completó un buen partido y el equipo lo extrañó muchísimo. Faltó ese jugador preciso y que muchas veces maneja los tiempos del partido. Eso hizo, en parte, que los dirigidos por Cappuccio no fueran efectivos con la pelota. Tanto Neves como el resto de su compañeros en esa zona no estuvieron cómodos.

Otro signo de preocupación que dejó ayer Nacional fue la falta de generación de juego en ataque. En el segundo tiempo, sin ir más lejos, pateó una vez sola al arco. Gonzalo Bergessio se las arregló como pudo aunque en algún entrevero estuvo cerca de anotar.

Entre lo positivo, al igual que los anteriores encuentros, estuvo el ingreso de D’Alessandro. El DT sigue apostando por el enganche argentino en los complementos. Ayer, en otro contexto de partido diferente al de los anteriores, tuvo que jugársela casi siempre al uno contra uno. Ganó casi todas aunque en muchas lo terminaron bajando con infracciones. Le faltó un socio capaz de colaborar con esa zurda exquisita que tiene este jugador de 40 años.

En lo que refiere a la tabla de posiciones, y donde radica el malhumor más importante de Nacional, es que no pudo ampliar la ventaja con Peñarol después del traspié que sufrió el aurinegro el sábado ante Villa Española. Sigue tres puntos arriba, pero sabiendo que el próximo domingo se verán las caras.