TORNEO CLAUSURA
El argentino, de 40 años, ya tiene 21 presencias con la camiseta tricolor, solo ha convertido un gol y no ha resultado decisivo en ningún partido.
Cinco meses después de su tan esperado debut con la camiseta de Nacional, Andrés D’Alessandro solo ha jugado 21 partidos, pero lo más trascendente es que hasta ahora no ha sido el futbolista que se esperaba. Ha convertido un gol y no se recuerda ningún juego en el que haya sido factor para sacar un buen resultado.
¿Ha sido una decepción? ¿Cuánto más se esperaba de él? ¿Por qué ha tenido tan poco protagonismo?
Su llegada fue muy hablada. Nacional lo contactó en 2020, pero su anuncio oficial y llegada no se produjo sino hasta enero de este año y debutó tres meses después de haber comenzado a entrenar. Fue el 21 de abril, en la primera presentación del tricolor en la edición 2021 de la Copa Libertadores en cancha de Argentinos Juniors (derrota 2-0) y lo hizo como titular. Esa fue la única vez que jugó los 90 minutos.
A lo largo de 21 partidos completó 824 minutos, fue titular en seis ocasiones y su único tanto lo anotó el 25 de julio ante Villa Española en el Gran Parque Central en el triunfo 3-0 por el Torneo Apertura. Pero empecemos a responder las preguntas.
¿Decepcionó D'Alessandro?
Quizás el término sea muy duro, aunque sí dio menos de lo esperado. Que un futbolista de su jerarquía no haya resultado decisivo en ningún partido es algo que llama la atención. Si marcaba diferencia en Brasil jugando para el Inter, debería haberlo hecho al menos en una ocasión en Uruguay, pero no fue así.
¿Qué se esperaba de él?
Nacional lo fue a buscar por sus condiciones futbolísticas, pero también para ser un espejo en el que se reflejaran los jóvenes. Desde el juego se pretendía que, con 40 años, cumpliera un papel similar al de Marcelo Gallardo en su oportunidad, el "Chino" Álvaro Recoba luego o Martín Ligüera (hoy su técnico) más recientemente, aunque con la diferencia de que estos últimos tres llegaron con menor edad. Esto es: no para jugar 90’, pero sí para entrar con rivales desgastados y marcar la diferencia con pases filtrados o tiros libres en los minutos finales. Aún no ocurrió.
¿Por qué no rindió?
Uno de los factores es que ha tenido menos participación de la esperada y eso pesa en la moral. “Es importante estar bien mentalmente; el fútbol uruguayo lo requiere”, dijo pocos días después de anotar su primer gol. Otra razón es que ha tenido aún menos minutos en la posición en la que más rinde: enganche. Ha jugado lejos del arco rival y en el último partido terminó insólitamente de puntero derecho. Casi ni la tocó.
Andrés D’Alessandro no ha colmado las expectativas aún, pero clase para hacerlo de aquí a fin de año le sobra.