TRICOLORES

Con Luis Suárez como el gran emblema del plantel, Nacional celebró un nuevo título del Torneo Clausura 2022. Lo sentenció con su victoria ante Cerrito en la penúltima fecha y se aseguró con él tener ventaja deportiva en la definición del Campeonato Uruguayo.

Para el Pistolero, que revolucionó el plantel y el fútbol uruguayo en general con su venida, la consagración fue también un desahogo y la satisfacción de cumplir con uno de sus objetivo acercando al tricolor a un nuevo título del Uruguayo, que sería el tercero para él.

Como era de esperarse, al término del encuentro los flashes se fueron con él e incluso también los cánticos de los hinchas que le mostraron todo su cariño: "Y de la mano de Lucho Suárez, todos la vuelta vamos a dar", se escuchó desde las casi 30 mil personas que asistieron al Centenario.

"No se va, Lucho no se va", fue otro de los pedidos de los hinchas que anhelan la continuidad de Lucho de cara a la temporada 2023 donde el salteño podría asumir la disputa de la Copa Libertadores con Nacional.

En medio de los festejos y de los cánticos, Luis Suárez se arrimó a la unión entre la Colombes y la América y allí se fundió en un abrazo con sus tres hijos y con su esposa Sofía Balbi ya que los cuatro se sumaron a la celebración.

Los niños jugaron en el arco de la Colombes y hasta anotaron algún gol que los hinchas festejaron, mientras que el Pistolero seguía celebrando, pero esta vez acompañado de sus seres queridos.

Esos que lo acompañaron en cada paso que dio en su carrera y que lo apoyaron en su retorno a Uruguay para cumplir el sueño de volver a gritar campeón con Nacional.