La polémica de la fecha 13 del Torneo Apertura ocurrió en Belvedere, luego de que Ricardo Caruso Lombardi explotara contra el árbitro principal del partido entre Liverpool y Miramar Misiones, Javier Feres, y le soltara algunos insultos subidos de tono. Como era previsible, la cosa no quedó ahí y siguen las repercusiones en todos los ámbitos.

Para contextualizar, la segunda tarjeta roja que dejó al Cebrita con nueve jugadores a los 90+4' del partido (por doble amarilla a Guzmán Pereira, ya perdiendo 2-1), desató la furia del entrenador argentino, que le reclamó al juez, seguidamente fue expulsado él mismo y elevó el tono de los insultos.

"Ni foul fue, ni foul fue. Ah, te van a aplaudir, te van a aplaudir. Mirá el VAR", le gritó el argentino al juez, que enseguida se acercó al banco de suplentes y le mostró la tarjeta roja, lo que desató todavía más la furia del DT, que siguió: "Negro de m***, jetón. No me voy a ir, mirá el VAR".

Horas más tarde, Caruso Lombardi se manifestó en sus redes sociales pidiendo disculpas por su "exabrupto" y aseguró que se siente "avergonzado". Pero la cosa no quedó ahí y —como se prevía porque no era la primera vez que el argentino apuntaba contra el aritraje—, el gremio de los árbitros (Audaf) ya se manifestó públicamente en la noche de este lunes, una vez concluida la fecha del Campeonato Uruguayo.

El comunicado comienza: "Ante las expresiones racistas realizadas por el Sr. Ricardo Caruso Lombardi", y continúa, entre otras cosas, de la siguiente manera.

"La Audaf considera absolutamente inaceptable cualquier manifestación de racismo u otras formas de violencia".

"El Sr. Caruso Lombardi intensificó su proceder, no solo insultando a nuestro compañero en el desarrollo de su trabajo, sino también discriminando a este por su color de piel".

"Es por esto que solicitamos a todas las partes, con las potestades suficientes para legislar en lo sucedido, que actúen en contra del infractor con la mayor severidad posible".