Redacción El País
El uruguayo Sebastián Avellino, preparador físico del entrenador Jorge Fossati en Universitario, se encuentra deprimido en prisión preventiva en Pinheiros (una hora de San Pablo) tras ser acusado de hacerle "gestos racistas" a hinchas brasileños en el estadio Neo Química Arena durante el partido ante Corinthians por Copa Sudamericana y no podrá testimoniar en libertad.

Este viernes el caso presentó avances, aunque negativos para el uruguayo. La Justicia rechazó el pedido de la defensa de Avellino, que el jueves solicitó un habeas corpus (derecho que protege a cualquier ciudadano ante arrestos) pidiendo la excarcelación.

Poco después de la resolución, Marta Echarte, cónsul general de Uruguay en San Paulo, explicó, en comunicación con 100% Deporte (Sport 890), que la negación del recurso deriva en que "Avellino no va a poder testimoniar en libertad, sino que quedará detenido por tiempo que no podemos determinar".

Echarte dio detalles del preparador físico, cuya familia se encuentra en Perú, y expresó que se siente "muy deprimido" aunque "está bien de salud". "La situación anti racismo en Brasil está muy delicada. Los jueces son implacables", añadió la representante uruguaya.

Acerca del lugar en el que se se encuentra Avellino, la cónsul dijo: "En este momento él está en un centro de detención Pinheiros en provisional" y añadió que se espera el traslado. "Lo más probable es que sea trasladado a otra prisión que queda en Itaí, a 600 kilómetros de San Pablo. Nos quedaríamos más tranquilos, por su integridad física. Ahora está con brasileños y dado el tenor que ha tomado el tema, es riesgoso. Además es trasmano, lejos, es problemático para ir, pero desde el punto de vista de seguridad nos sentiríamos más tranquilos porque es un centro de detención de extranjeros", expresó Echarte.

La defensa volvió a interponer el recurso habeas corpus para que la juez del caso revea la situación, pero habrá que esperar. Avellino será trasladado, a más tardar, entre el lunes y martes de la próximo semana.

La cónsul de Uruguay en San Pablo admitió que el video que trascendió en las últimas horas donde se perciben los gestos del preparador físico complicó la situación. "La situación anti racismo en Brasil está muy delicada. No solo por este caso. La juez se basó en las declaraciones del policía militar que estaba al lado de él y que lo vio, y en el video donde hace señas impropias. Ese video fue divulgado aquí en todas las televisoras y sería el centro por el cual se lo juzga".

Los equipos deben jugar el partido de vuelta el martes 18 de julio (21:30), sin embargo se estudia no disputar el partido o jugarlo en Paraguay.