EUROPA

La actitud y determinación con la que el Primer Ministro británico, Boris Johnson, actuó frente a los clubes ingleses para demoler las intenciones de crear una Superliga Europea puede terminar entregando al Reino Unido el respaldo total de UEFA para ser la gran candidata para organizar la Copa del Mundo de 2030.

Ese panorama, que se visualiza de forma rápida en los diarios españoles, particularmente en Marca, tiene como sustento la dura línea de amenazas y advertencias que sigue mandando Aleksander Ceferin contra los promotores de la Superliga.

El Real Madrid empató con el Betis en LaLiga y desperdició la chance de presionar al AtletiBy Agencia EFE

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El máximo dirigente del fútbol europeo, ahora en entrevista con Daily Mail, insistió que la acción que emprendieron los clubes “separatistas” no se va a cerrar sin consecuencias. Pero, en este caso, marcando diferencias entre los “rebeldes”, porque colocó a Real Madrid, Barcelona y Juventus en un sitial diferente.

Su elogio para la forma en la que los seis clubes británicos abandonaron la Superliga, reconociendo el error y pidiendo las disculpas del caso, más el encendido reconocimiento a Boris Johnson, es lo que refleja que la UEFA está muy cerca de entregar su respaldo a la candidatura del Reino Unido para el Mundial de 2030, dejando de lado la opción de España y Portugal, que también pretenden ser considerados como posibles organizadores.

"Estoy muy agradecido con el gobierno del Reino Unido, con todas sus autoridades, por cómo protegieron el fútbol", dijo Ceferin y si se recuerda que reiteradamente subrayó que la UEFA “sólo apoyará una candidatura europea, para no dividir el voto”, no hay que ser muy avispado para asociar qué es lo que puede pasar. Mucho más cuando el presidente de la UEFA enfatiza "agradezco mucho la protección del fútbol (que han hecho los ingleses), se lo agradezco mucho. Su infraestructura y enfoque del fútbol es el correcto".

Es real que la Federación Española de Fútbol suscribió su rechazo a la Superliga, pero pierde lejos con la forma en la que respondieron todas las autoridades inglesas.