Por Alberto Sobrero
Cristian Olivera(20) se ilusiona con llevar a cabo una buena temporada en Boston River. El extremo se prepara para mejorar su rendimiento con un claro propósito: volver a Europa. En una entrevista con Ovación contó por qué no arribó a Nacional en el último período de pases y cuál fue el motivo de su grito desaforado de gol ante Peñarol en la campaña 2022.

Olivera cerró un buen 2022: disputó un total de 12 encuentros con Boston River y convirtió cuatro goles, uno de ellos fue a Peñarol, su exequipo.

Además, el Sastre hizo historia en ese Campeonato Uruguayo ya que terminó en la cuarta posición de la Tabla Anual, que le permitió clasificarse por primera vez en su historia a la Copa Libertadores de América.

Varios clubes pusieron sus ojos sobre Olivera para poder incorporarlo y uno de los interesados fue Nacional. Algo que el mismo futbolista se encargó de confirmar en varias notas que dio en el último tiempo.

“Estaba casi un 60 por ciento hecho el pase”, afirmó el extremo a Ovación. No obstante, el presidente de Nacional, José Fuentes, explicó que el club nunca estuvo tan cerca de poder sellar la llegada del exjugador de Rentistas y Peñarol.

“Nacional, cuando terminó la temporada pasada (la 2022), estuvo interesado en fichar a Cristian Olivera. Hoy no hay ninguna negociación con ese jugador, más allá de reconocer que es un excelente futbolista. El plantel está cerrado salvo que aparezca algo que rompa los ojos”, manifestó Fuentes en una entrevista al programa Punto Penal (Canal 10).

Olivera reveló cuál fue el motivo que impidió su pase al tricolor: “Estuve muy cerca, pero el tema fue que no se llegó a un acuerdo entre Nacional y Almería de España (dueño de su pase)”.

“Mi representante me dijo que la negociación por mi contrato con Nacional no podía darse hasta que no hubiese un acuerdo con Almería”, insistió.

Foto: Marcelo Bonjour.

Olivera tenía mucha ilusión de poder arribar al tricolor ya que es hincha del club. “Desde chico es que soy fanático de Nacional. Siempre que podía iba a Los Céspedes para ver a los jugadores y estar cerca de mi ídolo, que era el Cacique Medina”, manifestó.

Ni bien se enteró que su pase a Nacional se cayó, aseguró que se sintió “un poco mal” y contó cómo hizo para sobrellevar ese momento.

“La verdad que me lo tomé un poco mal porque sentía que era una gran oportunidad para mi carrera. Pero lo bueno es que sigo en Boston River donde todos me tratan muy bien y estoy muy cómodo porque tenemos muchos objetivos por delante”, señaló.

El Kike hizo un gran 2019 con Rentistas, club que lo formó como futbolista. En esa temporada en la Segunda División disputó 25 encuentros y anotó tres goles. Además de su buen rendimiento, el bicho colorado consiguió ascender a la Primera División.

En 2020 Rentista se coronó campeón del Torneo Apertura, pero Olivera tan solo jugó 10 encuentros y marcó tres goles porque Almería compró su ficha para llevárselo lo antes posible. El conjunto español venía de tener un gran éxito con el pase de Darwin Núñez, que había vendido en una cifra millonaria al Benfica, y buscó tener el mismo resultado con el extremo.

Olivera solo vio acción en cuatro partidos de la temporada 2020/2021 y rápidamente lo bajaron al Almería II, la filial del club. A raíz de ello el extremo no se pudo adaptar y le pidió a su representante volver a Uruguay.

En 2021, en el primer mercado de pases de Ignacio Ruglio como presidente de Peñarol, surgió la opción de Olivera para reforzar al equipo, que en ese entonces era dirigido por Mauricio Larriera.

El Kike arribó al mirasol y muchos se ilusionaron por lo que había hecho en Rentistas en los últimos dos años.

Disputó un total de 20 encuentros con la camiseta de Peñarol y no consiguió marcar goles. En abril de 2022 dejó el club para pasar a entrenar con el plantel de Miramar Misiones.

El futbolista manifestó que su salida de Peñarol se debió a que nunca se encontró “bien física y mentalmente”. De esta manera, tuvo que recurrir a un psicólogo y a un psiquiatra para poder salir de esa dura situación.

“Lo que me mató fue que estuve un año solo en Almería (España) y en plena pandemia. De ahí me vine a Peñarol donde tuve dos partidos buenos y después la gente me cayó encima y decaí bastante en mi rendimiento”, explicó el extremo sobre los motivos de su salida del conjunto carbonero.

Foto: Leonardo Maine.

Evidenció que el club siempre lo ayudó. Asimismo mencionó quiénes fueron los pilares fundamentales para sobrellevar esa dura situación: “Me apoyé en mi familia, mi mujer y mi hija para salir de ese momento”.

El pasado 12 de octubre Boston River venció 2-1 a Peñarol en el Parque Viera para, prácticamente, clasificarse a la primera fase de la Copa Libertadores de América por primera vez en su historia. En cambio, el carbonero se quedó sin chances de acceder al certamen más importante de Sudamérica.

La apertura del marcador la hizo Olivera con un espectacular golazo que dejó sin posibilidades de reacción al golero Kevin Dawson. Lo celebró de una forma muy desaforada y tocándose el pecho en varias oportunidades.

“Muchos compañeros me preguntaron si hacía un gol si lo iba a celebrar, y yo les dije que sí porque no tenía nada de malo”, afirmó.

“Para mí era un partido muy especial porque no me había ido de la mejor forma de Peñarol y le quise demostrar a la gente y a los directivos que yo podía dar más y por suerte puede hacer un golazo que sirvió para conseguir el triunfo”, comentó.

Hoy Boston River recibirá al Zamora de Venezuela en el Estadio Centenario, a partir de las 21:00 horas. Se tratará de un encuentro histórico para el Sastre debido a que por primera vez en su historia disputará la Copa Libertadores.

Olivera contó que todo el plantel de Boston River ha “vivido como nunca” estos últimos días porque es un momento histórico para toda la institución.

“También tenemos mucha tranquilidad por el potencial que contamos”, dijo.

Foto: Twitter @SerieRdeLP

Por su parte, mencionó cuáles son sus metas para este 2023: “Quiero llevar a Boston River a lo más alto posible y así poder volver a España ya que en junio se termina el préstamo y tendría que regresar al Almería”.

Olivera solo tiene una cosa en la cabeza: entrenarse todos los días para mejorar. Sabe que en Boston River encontró una segunda oportunidad para seguir jugando al fútbol. Es por ello que solo piensa en dar lo mejor de sí para volver al Almería y demostrarles a todos de que tiene condiciones y que puede estar en ese lugar, en la elite del fútbol.