Redacción El País
A última hora de este domingo Peñarol y Colo Colo empataron 1-1 en su primer partido del año en el Campus de Maldonado por la Serie Río de la Plata 2025, y aunque este torneo de pretemporada no admite empates porque exige una definición por penales tras los 90 minutos, este partido sí terminó en igualdad.

Maxi Silvera puso el 1-0 para el Carbonero en el primer tiempo y Arturo Vidal empató para el Cacique en el segundo, pero el encuentro pasó a un nivel más allá de lo futbolístico por la cantidad de situaciones inesperadas que ocurrieron durante el trámite.

Los primeros 45 minutos transcurrieron con normalidad y el Manya se fue con ventaja mínima al descanso. Pero antes del comienzo del complemento se vivió una secuencia insólita: Diego Aguirre hizo 11 cambios para el segundo tiempo, aunque se trata de algo habitual en este tipo de amistosos de preparación, no lo permitía un reglamento que ponía el límite en siete modificaciones por equipo, salvo que existiera un acuerdo previo entre cuerpos técnicos y ahí podían ser hasta 10.

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Luego de unos cinco minutos de interrupción en los que reinó la incertidumbre entre todos los presentes, porque aunque Jorge Almirón y el cuerpo técnico del equipo chileno diera el visto bueno a que Peñarol cambie el cuadro por completo, las autoridades del torneo insistieron en que debían volver al menos cuatro titulares de Peñarol (ya en las duchas) para que el partido se reanudara.

Pero Aguirre se plantó: "Suspéndanlo si quieren", dijo el DT aurinegro y el partido se reanudó, aunque con los ánimos caldeados.

Durante el complemento hubo algunos cruces subidos de tono como para tratarse de un partido amistoso, principalmente entre Ignacio Sosa de Peñarol y el uruguayo Alan Saldivia de Colo Colo.

Justamente ellos dos protagonizaron un encontronazo en los minutos finales del juego en el que intercedieron varios jugadores de los dos clubes para separar, y finalmente no pasó a mayores. Pero tanto Saldivia como Javier Méndez (desde el banco de suplentes el primero en cruzar al jugador de Colo Colo cuando se le fue encima a Sosa) fueron expulsados.

El partido siguió y luego de los cuatro minutos de descuento que adicionó el árbitro Andrés Matonte, los equipos debían definir el empate desde la tanda de penales.

Sin embargo, luego de unos segundos el equipo chileno abandonó el campo de juego ante la incredulidad de todos los presentes.

Se escuchó un grito de "¡Hay penales!" al que los chilenos hicieron caso omiso por entender que el partido ya se había desvirtuado.

Al final, el partido terminó en empate, un resultado que probablemente no vuelva a repetirse en los otros 24 partidos que quedan de este torneo.