Pasó de todo. Rojas, tumultos, fútbol y goles. Pero en medio de todo eso, Peñarol sacó la cara, reapareció tras una buena siesta y tumbó a Liverpool en el Estadio Campeón del Siglo ganándole con claridad por 3 a 1 para avanzar a las semifinales de la Copa AUF Uruguay.
Y el gran artífice de esa notable producción mirasol fue Diego Aguirre, quien mientras el Consejo Directivo no consigue contratar el centrodelantero de peso que necesita y a nivel institucional un “9” juvenil como Luciano González no pudo integrar el plantel anoche por no tener contrato profesional, volvió a demostrar que dirigir al club le calza como anillo al dedo.
Es que la Fiera planteó un partido que mientras fue tal, lo tuvo a su equipo como dominador, incluso cuando quedó con uno más por la roja de Ignacio Rodríguez.
Aunque a los 30’, Luciano Rodríguez sacó un conejo de la galera y anotó un golazo para enmudecer al Campeón del Siglo. Baldazo de agua fría para Peñarol.
Pero había un equipo que intentaba jugar, que generaba fútbol y que llegaba con más peligro sobre el área rival con un Gastón Ramírez exhuberante y con un Leonardo Fernández muy movedizo en la ofensiva.
Y esa dupla empató el partido a los 43’. Pase de Gastón y definición de Leo: 1-1.
En el complemento, a los 47’ Léo Coelho, de muy mal partido, debió ser expulsado por doble amarilla y Pablo Giménez no se la mostró.
Pero había más. A los 59’, el árbitro cobró penal por mano de Miguel Samudio y el paraguayo se fue expulsado, pero cuando se iba, hizo gestos que desataron la ira de varios rivales y se llevó a Maxi Silvera, quien vio la roja a los 65’.
Once minutos después se pateó el penal y Leo Fernández le rompió el arco a Lentinelly para el 2-1 mirasol.
Apenas 120 segundos más tarde, Agustín Cayetano vio la roja por falta sobre Leo Fernández y el negriazul se quedó con ocho. Luego, con siete por la expulsión de Jean Pierre Rosso a los 83’.
Hasta ahí, el aurinegro no podía liquidarlo y el negriazul tuvo una contra que casi es letal, pero el desgaste empezó a sentirse, Liverpool falló en defensa y Francisco Bregante lo bajó a Byron Castillo en el área a los 95’. Un minuto después, Leo Fernández le volvió a romper el arco a Lentinelly y puso el 3-1 definitivo. Hat-trick de Leo.
Despertó Peñarol. Con un Ramírez de galera y bastón, con un Leo Fernández imparable y goleador, y con mucho fútbol, el equipo de Aguirre dio un paso grande en la Copa AUF Uruguay y se sacó una espina con Liverpool, pero sigue teniendo un sector endeble: la zaga central.
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