Diego Aguirre, director técnico de Peñarol, habló en exclusiva con Ovación tras la goleada 4-0 ante The Strongest por la ida de los octavos de final de Copa Libertadores. El entrenador narró la emoción que sintió al entrar al Estadio Campeón del Siglo, reveló cuál fue el dato sobre Leo Fernández que lo asombró y se refirió a la "pintoresca" iniciativa de un hincha del aurinegro.
- Ingresaste al CDS unos minutos antes de que arranque el partido ante The Strongest y te quedaste mirando a la gente, ¿qué sentiste en ese momento?
- Mucha emoción. Me siento un privilegiado porque la demostración del cariño de la gente hacia mí es muy grande y trato de devolverla con todo lo que puedo. Es una sensación linda e increíble. La Copa Libertadores es algo muy especial para el hincha de Peñarol y eso va a ser siempre así. Me imagino al Estadio Campeón del Siglo con entradas agotadas todo el año.
- ¿Qué opinión tenés sobre el video viral de Leo Fernández, que antes de recibir la pelota ya le indica a Jaime Báez a dónde va a ir la asistencia?
- Leo Fernández es calidad porque eso lo hace quien puede y no quien quiere, ¿entendés? Tiene genialidades para tomar decisiones y para ver cosas que los demás no ven.
- Lleva 15 goles y 13 asistencias en 30 partidos con Peñarol, ¿qué opinás?
- No sabía bien la estadística, pero es extraordinaria, una locura. Pero no solo eso, sino todo lo demás: lo que hace jugar al equipo.
- A nivel de redes sociales hay algunos hinchas de Peñarol que están fomentando una campaña para comprar el pase de Leo Fernández con la consigna de que 40.000 personas deben poner 200 dólares, ¿vos estarías dispuesto a ayudarlos?
- ¡Dame dos! Ja. Ay, qué gracioso, sí, sí. Pero bueno, está bien, es pintoresco y gracioso todo lo que ha despertado Leo Fernández en la gente. Ojalá que Leo pueda terminar este año de la misma manera que lo empezó y que sea lo mejor para él. Y si lo mejor para él es Peñarol, bienvenido sea, claro.
- ¿Cómo es Leo en la interna del vestuario y en el día a día?
- A Leo le gusta mucho la música, cantar y tocar la guitarra en los asados. Es como que entre todos lo cuidamos.
- ¿Has tenido la posibilidad de cantar un tema con él?
- No, eso no porque no es lo mío y me separo un poco. Eso es más para los jugadores, que se quedan más rato y cantan entre ellos.
- Muchos definen a los entrenadores como gestores de las emociones de 30 futbolistas, ¿vos cómo hacés para ejecutar esa tarea sabiendo que entrás con la piel erizada a la cancha?
- Y bueno hago lo que puedo porque es muy fuerte toda la emoción que se vive, lo que te transmite la gente, cómo se gritan los goles, y a veces me desborda. Hay que tratar de llevarlo lo mejor posible en ese sentido y tratar de ser un poco frío, pero es difícil.
- Alguna vez te escuché decir que en ningún lugar sentiste la comodidad y la espalda que te da el mundo Peñarol, ¿cómo se explica?
- Lo que pasa es que hay vínculos que son para siempre y no podés desligar mi vida de la época de futbolista cuando fuimos campeones de América con un gol mío en el minuto 120 para darle la quinta Copa Libertadores a Peñarol. Eso a mí me hace ser parte de la historia eterna, esté vivo o no esté vivo.
Y después si sumás que ganamos Campeonatos Uruguayos, llegamos a la final de la Libertadores 2011, todo se retroalimenta y se fue dando una idolatría que es tremenda y recíproca porque yo siento mucho, me emociona y quiero mucho al club. Doy lo mejor y trato de hacerlo de la forma más responsable posible. Créeme que lo cuido al club y trato de ayudar en todo lo que puedo.
- ¿Qué tiene el Estadio Campeón del Siglo para que hayan perdido solo un partido de 20 disputados por Libertadores?
- Y bueno, se está haciendo místico. Qué tiene no lo sé, pero que Peñarol se está haciendo fuerte de local no hay ninguna duda. La gente empuja mucho y ojalá podamos seguir ganando en nuestra cancha.
- En la ida ante The Strongest te tocó sacar a uno de los capitanes como Maxi Olivera para poner de titular a Lucas Hernández. Ahora para la vuelta está disponible Gastón Ramírez, el dueño de la cinta, pero Eduardo Darias viene de brillar, ¿cuál es tu plan para reordenar al equipo?
- Y bueno, lo voy a ir llevando. Ahora a tratar de meter la cabeza en el partido del sábado, que empieza el Torneo Clausura y tenemos que ganar para comenzar bien esta segunda parte del año. No quiero pensar demasiado en lo que viene después, vamos a tener unos días para eso.
- El miércoles hizo su debut Adrián “Toto” Fernández, ¿en qué posición específica te lo imaginás en la mitad de la cancha?
- Lo tiramos a la cancha para darle el debut, que el partido lo permitía, pero con cautela porque una cosa es hablar de Jaime Báez con nueve años en Italia, o de Facundo Batista, con varios años en México, o hablar de Avenatti, con 10 años en Europa, y otra cosa es hablar de Toto Fernández que antes de venir no jugó en Primera División. Entonces es una apuesta que hay que llevarla con mesura, de a poco iremos viendo y la mochila no es para él. Hay que dejarlo tranquilo, ver qué jugador encontramos y si tiene condiciones para jugar en Peñarol. Es una apuesta, no es una realidad.
- Hay un video tuyo de la Libertadores 2011 en el que decís: “Sí, la suerte la entreno mañana a las 15:30 horas”, ¿qué opinás cuando lo ves hoy?
- Me da gracia, ja, lo que pasa que en ese momento decían: la suerte, la suerte, la suerte, entonces expresé eso como diciendo: ‘Algo de suerte tenés, pero también hay que laburar, si no es imposible‘ .
- ¿Y esa cuota de suerte que se necesita para obtener la sexta la estás entrenando?
- Ja, es una buena pregunta, pero no. Vamos paso a paso, ahora estamos entrenando la forma de clasificar a cuartos y después iremos viendo de a poco con qué nos encontramos, hay que ir con mesura.
- ¿El rendimiento de la ida ante The Strongest te dejó esa tranquilidad de recuperar el nivel que mostraron al ser campeones invictos del Torneo Apertura?
- Es que estaba dentro de lo previsto. Cuando empezó el año nosotros nos pusimos un objetivo bien claro que era ganar el Torneo Apertura de forma invicta y pasar la fase de grupos de Libertadores tras 13 años. Lo logramos ganándole a equipos importantes como Rosario Central y Mineiro. Entonces, la primer parte del año fue buenísima y después se hizo un poco largo entre el 28 de mayo que jugamos con Central y el partido con The Strongest. Fueron dos meses donde no había objetivos importantes. Lo tomaba como un afloje normal y sabía que íbamos a hacer un gran partido. El miércoles activamos el modo de la primera parte del año.
- ¿Te gusta el rol de líder unitario que tenés hoy?
- Totalmente porque no nos podemos olvidar que el gran objetivo es Peñarol. Está por encima de todos y, por más que (ese dicho) sea algo repetido de la boca para afuera, hay que ejecutarlo y hacerlo. Tenemos que estar unidos, que eso es lo que nos da la fuerza.
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