Redacción El País
Peñarol se hizo fuerte en su Estadio Campeón Del Siglo y derrotó a Liverpool 3-1 por los cuartos de final de la Copa AUF Uruguay, en un partido desvirtuado completamente por las tarjetas rojas que aparecieron sin parar producto de la tensión entre los dos equipos: terminaron 10 jugadores aurinegros contra siete negriazules.

Luego de la victoria, importante para el local que encadena dos y se mete en la definición del torneo, Diego Aguirre destacó: "No me gustó lo que pasó, hubo mucha agresividad desmedida, mucha patada fuera de lugar".

"Fue un partido raro, se detuvo mucho el juego por las expulsiones, muchas faltas, el viento también influyó", comenzó el entrenador aurinegro luego de terminado el encuentro.

Y volvió a referirse a la agresividad que fue protagonista: "Se podrían haber lastimado unos a otros. No me gustó o que vi. Nosotros podríamos haber perdido a Maxi Silvera y a Leo Fernández por dos patadas desmedidas e innecesarias. Por suerte no hubo jugadores lesionados. Ojalá que no vuelva a pasar. Hay que jugar con cierta agresividad, pero hay que tener un límite porque podés lastimar a un compañero".

Sobre el funcionamiento de su equipo, enfatizó otra vez en que ·es un equipo en formación": "Vamos de a poco dándole lugar a los jugadores, viendo sus rendimientos y creciendo partido a partido. Conseguimos dos victorias merecidas en los primeros dos partidos oficiales, y ahora comienza el Campeonato Uruguayo el fin de semana que viene y esperemos seguir ganando".

Aunque subrayó que a Peñarol le costó cerrar el partido, incluso con tres jugadores de más: "Lo bueno es que se están generando varias situaciones, pero nos está costando concretarlas y eso es algo que tenemos que mejorar".

Sobre el rendimiento (y hat-trick) de Leo Fernández, primero se limitó a decir: "Muy bien, muy bien, muy bien". Y después profundizó: "Más allá de que fueron de penal, él genera situaciones, goles, asistencias. Ilusiona porque él vino para ser un jugador importante para el equipo, es un jugador distinto".

Finalmente, consultado sobre si Peñarol-Liverpool se está convirtiendo en un "partido especial", respondió: "No lo creo. Son partidos exigentes porque son equipos que probablemente van a pelear el campeonato y van a estar definiendo arriba, pero no hay que crear una rivalidad donde no la hay".