ENTREVISTA
El delantero celeste vive un gran momento en lo personal y también a nivel grupal con Curicó Unido quien se ilusiona con la buena campaña que está realizando.
Pasaron 17 años de aquel día y hoy Diego tiene su carrera encaminada luciendo la camiseta de Curicó Unido de Chile.
“Se podría decir que estoy en mi mejor momento. Eso va de la mano con el buen momento del equipo y también para que el delantero ande bien necesita que le lleguen pelotas con claridad para convertir y creo que eso me ha ayudado mucho”, confiesa a Ovación desde Chile.
Con ocho goles en 18 partidos, el atacante uruguayo es el máximo goleador de un equipo que hoy tiene un gran objetivo en mente: “El plantel se armó bien este año para pelear cosas históricas para el club que en un primer objetivo es una copa internacional que jamás pudo cumplir y a raíz de eso creo que de tan buenos jugadores y buen plantel que se armó hoy nos encontramos en una posición privilegiada que nos tiene peleando el campeonato”.
Es que hoy Curicó está tercero en la tabla de posiciones a solo cuatro puntos de Colo Colo, el líder del certamen, y en una racha de siete juegos sin derrotas.
“No me puedo quejar, en el fútbol chileno me recibieron de muy buena manera y de cierta forma me metió un poquito de presión porque tenía que andar bien para retribuirles ese cariño y en el primer partido termino convirtiendo y eso me dio un alivio para todo lo que vino después”, afirmó Coelho.
Surgido en Nacional, el delantero hoy no piensa en su regreso al club al que sí sigue de forma ferviente como hincha. “Siento que en Nacional cumplí un sueño que fue debutar, hacer un gol en el Parque, pero luego no tuve muchas chances y por eso quise salir en búsqueda de minutos”, confiesa quien llegó a Boston River para terminar anotando 11 goles en 36 partidos.
Su carrera continuó en Defensor Sporting y luego en Cerro donde con 11 goles en 24 partidos hizo los méritos para dar el salto al exterior. “Hoy estoy pensando en mi carrera, en generar un respeto en el fútbol chileno, hacerme importante acá o en otro lado donde me toque y estoy pensando en lo que es el exterior y ojalá pueda seguir acá por muchos años”.
SU PADRE. “Con mi viejo es imposible no hablar de fútbol. Cuando estaba en Uruguay era todos los días, acá él no se pierde ninguno de los partidos: contrató el fútbol chileno. Termino y me llama, me corrige y lo debatimos. Intercambiamos opiniones y estamos todo el tiempo hablando y siempre estoy aprendiendo de él que es un sabio”, admite.