EFE
A primera hora de este miércoles se definió el grupo E de la Eurocopa de Alemania 2024, y se reafirmó como el más parejo del torneo porque habían llegado los cuatro equipos empatados con tres puntos cada uno, y la última fecha fueron dos empates que dejaron a los cuatro con cuatro unidades, y tres clasificados a los octavos de final.

En la ciudad de Leipzig, Ucrania y Bélgica protagonizaron otro partido errático, con un fútbol irrelevante salvo alguna aparición aislada de Kevin De Bruyne. Al primero no le alcanzó para clasificar porque lo condenó la diferencia de goles, mientras que el segundo se metió entre los 16 mejores, donde se enfrentará con la poderosa Francia.

Es la Eurocopa de los equipos que han perdido el alma. Bélgica es una de ellas, como Francia, Italia e Inglaterra. No funcionan como antes, aunque pueden despertar en cualquier momento. Pero, por ahora, son equipos que no ofrecen casi nada, que ganan por inercia y que deberán dar un volantazo para aspirar a ganar el título.

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Bélgica, eternamente dubitativa, navegando entre las luces y las sombras desde que fue proclamada candidata a ganar algo, afrontó la última jornada de la fase de grupos con el empuje de su victoria frente a Rumanía (2-0) pero con el recuerdo de su derrota en un estreno errático ante Eslovaquia en el que perdió 0-1. El empate podía bastar al equipo dirigido por Domenico Tedesco, mejor situado que Ucrania pese a sumar los mismos puntos, tres, igual que sus otros dos rivales.

El técnico italiano no cambió nada respecto a su anterior choque. Sólo quitó obligado a Lukébakio, sancionado, y dio una oportunidad a Trossard, jugador 'número 12' en el Arsenal y también en Bélgica por desgracia para sus intereses.

Ucrania estaba obligada a ganar. El empate, probablemente, no le iba a servir para nada. Y más cuando en el otro encuentro las tablas clasificaban tanto a Rumanía como a Eslovaquia y se intuía un posible 'biscotto'. Por tanto, la selección de Serhiy Rebrov no podía especular con nada, aunque sorprendió con su alineación en la que faltaron un par de sus figuras, como Zinchenko y Mudryk. También sentó en el banquillo al veterano Yarmolenko, pero eso era más esperable. En su lugar, aparecieron Yaremchuk, Svatok y Mykolenko.

Por otro lado en Frankfurt, las selecciones de Eslovaquia y Rumania empataron este miércoles 1-1, con lo que ambas se clasificaron a los octavos de final de la Eurocopa.

Eslovaquia encontró el gol de la ventaja en el minuto 24 con un gol de cabeza de Ondrej Duda aprovechado un centro de Kucka desde la derecha. Luego, en el 37, Razvan Marin empató de penalti.

Los eslovacos buscaron controlar el partido con un juego estructurado mientras que los rumanos procuraban causar caos en la defensa contraria con ataques rápidos.

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El resultado les servía a los dos rivales desde el comienzo, a Rumania incluso le alcanzó para el primer lugar del grupo y al final pareció conformarse con el resultado y optó por defenderse después de que a lo largo del partido ambos equipos habían tenido posibilidades para alzarse con la victoria.

Durante la mayor parte del partido ambos combinados buscaron el gol y tuvieron ocasiones. En el 61, del lado rumano Razvan Marin tuvo dos posibilidades seguidas. La mejor ocasión eslovaca llegó en el 64 con un remate de Strelec dentro del área ante el que Nita reaccionó con una gran atajada.

También hubo intensidad de parte de los dos equipos que no cesó tampoco cuando una tormenta llenó el campo de agua y dificultó el juego.

Hacia el final, Rumania se replegó mientras que Eslovaquia intentó seguir atacando, probablemente consciente de que el tercer lugar implicaba tener que encontrarse con España en octavos de final.

La víctima del empate entre las dos selecciones es Ucrania, que se queda fuera con cuatro puntos como cuarta del grupo.