Redacción El País
Con la ventaja de cuatro goles que sacó en el Campeón del Siglo, Peñarol subió 3581 metros de sobre el nivel del mar para enfrentar a The Strongest en el Estadio Hernando Siles de La Paz, por la vuelta de los octavos de final de la Copa Conmebol Libertadores, y finalmente se metió entre los ocho mejores de América.

El aurinegro no se achicó ante la altura, pero Diego Aguirre eligió un planteo cauto con tres zagueros (Coelho, Méndez y Rodríguez) que completaron la línea de cinco del fondo junto a Milans y Olivera.

La altura hizo complejo el juego porque la pelota viajó con mucha velocidad y los controles se volvieron difíciles, lo que por momentos hizo que el juego fuera cortado y faltara precisión de los dos lados.

Si bien el local llegó más veces y convirtió a Aguerre en figura, se chocó con líneas de presión sólidas y la mayoría de las veces se vio obligado a probar desde afuera del área. Al final, la única diferencia la marcó el penal sancionado por el VAR.

Peñarol también tuvo sus chances y amenazó el arco del Tigre mediante algunos contragolpes.

El mejor de Peñarol y responsable de que la diferencia que sacó el aurinegro de local no corriera peligro. Seguro cada vez que intervino para cortar centros por arriba y por abajo, y con tres atajadas a remates potentes de afuera del área que pudieron terminar en gol, principalmente por la fuerza que sale la pelota a raíz del efecto de la altura.

También atajó una a quemarropa, luego de un centro que cruzó toda el área y el delantero rival conectó en el segundo palo. Se estiró todo lo que pudo y salvó con los pies.

En el penal no tuvo nada que hacer. Fue muy fuerte al medio.

Foto: Peñarol

Enorme sacrificio por la banda derecha. Corrió todas las pelotas desde el fondo hasta incluso llegando a centrar en la última línea. Además, muy comprometido en la marca, aspecto en el que fue muy sólido.

Salió extenuado a los 85' por Camilo Mayada.

Foto: EFE.

Sobre todo por lo hecho en el primer tiempo, fue el mejor del fondo aurinegro. Muy seguro en la marca y rechazando todo lo que llegó al área por arriba.

La mano involuntaria que advirtió el VAR y terminó derivando en el penal no mancharon su partido. Jugó con autoridad y ganó todos los duelos individuales.

Aguirre lo puso de líbero y se limitó a despejar toda pelota que se arrimó al área, y a hacerle sobra al delantero de referencia de The Stropngest. Correcto partido.

Firme en la marca y rechazando todo lo que le llegó. Un eslabón más de la sólida línea de cinco que paró Aguirre, que no permitió filtrarse a los delanteros de The Strongest.

Sobrio. Se limitó a lo que mejor sabe hacer y lo que pedía el partido por la abultada diferencia que había en el marcador global: marcar. Cubrió con seguridad la banda izquierda, priorizando la seguridad defensiva.

Prácticamente no se lanzó al ataque, pero tampoco fue necesario porque Peñarol generó peligro principalmente por la banda derecha.

Foto: AFP.

Responsable de la salida de la pelota jugando como el volante más adelantado e intentando lanzar a campo abierto a Javier Cabrera y Maxi Silvera.

Generó dos faltas al borde del área que no pudo concretar porque la pelota no bajó como de costumbre. Estuvo fino con la pelota en los pies a pesar de la dificultad de la altura.

Salió a los 77' por Gastón Ramírez.

Fue el balance del equipo. Jugó de mediocentro, cubriendo la zona y ocupado de no dejar ningún hueco libre entre las líneas de presión. Sin mucho contacto con la pelota, pero una pieza clave en el embudo que planteó la Fiera.

El más sacrificado del mediocampo, algo tirado a la izquierda pero muy comprometido en la marca. Con Damián García curbiendo la zona central y Leo Fernández encargado de la salida, es el que más desgaste hizo de los volantes. Salió a los 61' por Lucas Hernández.

Muy participativo y objetivo de la mayoría de los balones largos. Corrió cada balón como si no le pesara la altura, intentó con un remate de afuera y metió dos centros al área que pudieron haber terminado en gol. Mucho desgaste y sacrificio. Salió extenuado a los 77' por Jaime Báez.

Foto: AFP.

Como el equipo se plantó sobre su línea de cinco la pelota no le llegó tanto y jugó alejado del área rival, donde marca la diferencia, pero eso no le impidió ser uno de los mejores de Peñarol.

Bajó a pivotear y resolvió bien cada vez que intervino, con controles de gran calidad y entregando con precisión o generando faltas.

También fue picante arriba cuando la pelota le llegó, con buena movilidad y buenos controles, que incluso le permitieron rematar al arco desde adentro del área en una ocasión en el primer tiempo.

Foto: AFP.

Ingresó a los 61' en el lugar de Darias, para ubicarse sobre la banda izquierda en la zona de volantes.

Ingresó a los 61' por Silvera para jugar como referencia de ataque. Le llegaron algunas pelotas que cuando no pivoteó, generó faltas y minutos valiosos de descanso.

Ingresó a los 77' por Javier Cabrera para jugar como segunda punta, volcado hacia la banda derecha.

Ingresó a los 77' por Leo Fernández para jugar en el mediocampo, con la misión de tener la pelota y bajarle las revoluciones al partido.

Ingresó a los 85' para sustituir en la banda derecha a Pedro Milans.