Redacción El País
El pasado sábado en el Estadio Marcelo Bielsa de Rosario (Argentina), el Newell's Old Boys de Mauricio Larriera le ganó 1-0 a Defensa y Justicia por la cuarta fecha de la Liga Profesional, con gol de Armando Méndez. Pero a pesar del triunfo, el entrenador uruguayo sigue siendo cuestionado en la vecina orilla porque no encuentra un estilo de juego para su equipo, y aprovechó la conferencia de prensa para hacer su descargo.
Larriera lleva casi cinco meses a cargo del plantel principal de Newell's en los que ha tenido altibajos, propio de cualquier equipo de fútbol. Comenzó la temporada con cuatro victorias al hilo que sirvieron para entusiasmar a los hinchas leprosos, pero no pudo mantener el envión y terminó la Copa de la Liga con seis victorias, tres empates y cinco derrotas, y sin clasificar a la fase definitoria.
Ya en la Liga Profesional, acumula tres triunfos y una sola derrota en las cuatro primeras fechas y parece haber enderezado el timón.
"Hoy servía un solo resultado que era ganar, por encima de las formas, aunque hoy por momentos nos parecimos más al equipo que fuimos las primeras ocho fechas, más allá de triunfos y derrotas. Estamos en Newell's, un equipo grande que tiene la obligación de ganar de local", comenzó la conferencia el uruguayo.
Enseguida fue consultado: "¿A qué juega el equipo de Larriera?". Y comenzó su descargo.
"Hoy recuperamos un poquito el estilo de nuestro mejor momento, cuando Larriera era Guardiola y los jugadores eran los del City, que no era tan así y lo avisé con bastante antelación", dijo primero.
"Me van a tildar de vende humo en las redes cloacales, como siempre, a las cuelas ni miro pero me entero. En éxito y el fracaso son meros impostores, entonces yo cuando gano y cuando pierdo soy el mismo. Cuando sucedes cosas extrañas no, tampoco soy tan tonto ni tan romántico", sentenció.
"Hoy estoy priorizando el resultado por encima del modelo de juego, estoy siendo un poquito más resultadista. Eso no significa que pierda mis convicciones, pero me tengo que adaptar porque nos está costando que el modelo de juego vaya de la mano de los resultados, y nos fuimos desdibujando", agregó.
Y sobre la pregunta del estilo, concluyó: "Hoy estamos intentando recuperar patrones de juego, mientras tanto estamos jugando para ganar. Cometer menos errores, ser más eficaces en las áreas".
Pero luego también fue consultado por las constantes rotaciones del plantel, y expresó: "Tratamos de que estén lo más motivamos posibles todos, tenemos un montón de futbolistas".
"El gran desafío de los entrenadores pasa por la gestión y más para los que tenemos una conducción humana, como yo. (...) A todos contentos no los podemos tener, pero el jugador siempre lo que reclama es que vayamos de frente", señaló.
"Y puedo ser un burro como entrenador, pero muy burro. Pero como ser humano, yo no sé si podrán encontrar una persona mejor que uno y lo digo hasta con soberbia. Mejor ser humano que yo, yo creo que es imposible. Igual que yo, probablemente. Y mejores que yo como entrenadores, un montón. Pero ser una mala persona, no, ni por asomo", expresó el DT.
Y finalizó: "Y cuando tomo decisiones, las tomo con ciertas convicciones: pongo los valores, la ética y la moral. Que al hincha en general le importa un rábano eso, para mí es lo principal. Si le pega con las dos piernas, bárbaro, pero si es buena gente y buen profesional. Por eso le estoy hablando de la gestión, que es el gran desafío que tenemos, porque es una actividad humana y no hay que olvidarse de eso".
Mauricio Larriera post partido: "Puedo ser un burro como entrenador pero como ser humano, mejor que yo no hay"🔴⚫ pic.twitter.com/dcrs03EKgo
— Zapping Sport - 22 años (@ZappingSportRos) May 26, 2024