COPA LIBERTADORES
El árbitro uruguayo sancionó la pena máxima en la hora, pero cayó en un error porque la mano era del jugador de Universidad Católica que atacaba.
La molestia de los jugadores de Sporting Cristal dentro de la cancha era evidente. A los 87', el árbitro uruguayo Leodán González sancionó un penal en contra de los incaicos en la Copa Libertadores, pero en una jugada en la que debió cobrar falta de ataque por mano.
Nehuén Paz, zaguero de Universidad Católica, fue en busca de la pelota en un tiro de esquina, la pelota pegó en su mano, pero González interpretó que la mano era del jugador de Cristal por lo que sancionó un penal que valió el 2-1 para los chilenos y los tres puntos para los trasandinos.
La molestia de Sporting Cristal fue tal, que la propia institución emitió un comunicado en las últimas horas en el que se solicita a la Conmebol "que se tomen las medidas correspondientes y se den las sanciones necesarias al equipo arbitral que fue responsable de esto. Medidas, que lamentablemente no podrán devolvernos los puntos cedidos, pero que deberían sentar una base para el futuro, porque estas situaciones no deben volver a ocurrir por el bien del fútbol sudamericano".
"Ha sido evidente el fallo arbitral a favor de nuestro rival en los minutos finales del partido, ratificado con las claras imágenes de la transmisión del partido, lo cual significa una gran afectación a nuestro club, considerando que se sancionó penal en nuestra contra, luego de un claro uso de la mano de un jugador del equipo rival", agregó la institución incaica.
Expresamos nuestra indignación por lo acontecido en el partido de esta noche. pic.twitter.com/ab5FHEutr6
— Club Sporting Cristal (@ClubSCristal) April 13, 2022